Yucatán.- El Tribunal Primero de Juicio Oral sentenció a 30 años de prisión a una persona que fue hallada responsable del delito de homicidio en razón de parentesco, ocurrido en el municipio de Mocochá.

En la sala 7 del Centro de Justicia Oral de Mérida, se celebró el día de hoy la audiencia de lectura y explicación de sentencia después de que las juezas, Nidia Guadalupe Celis Fuentes, Ileana Georgina Dominguez Zapata y Fabiola Rodriguez Zurita, quienes conforman el Tribunal Primero de Juicio Oral del Poder Judicial del Estado emitieran, por unanimidad, fallo en sentido condenatorio en una audiencia anterior.

La relatora en este juicio fue la jueza Dominguez Zapata, quien leyó la sentencia que determinaron las juezas, seguidamente, la jueza Celis Fuentes explicó al sentenciado y al denunciante que las pruebas desahogadas en su totalidad acreditaron el delito y la responsabilidad penal del acusado, más allá de toda duda razonable.

También mencionó que a pesar de que no existe una prueba directa, no fue indispensable esta, ya que las pruebas valoradas en su conjunto fueron suficientes para destruir el principio de presunción de inocencia con el que contaba el acusado y acreditar su plena participación como autor del delito.

Debido a eso se le impuso la pena privativa de libertad de 30 años de prisión, el pago de la reparación del daño a favor de las víctimas indirectas por la cantidad de $1,279,226.00, se le privó de sus derechos de familia y no podrá contar con la patria potestad, tutela o curatela de sus hijos, también se le amonestó y se le suspendieron sus derechos políticos.

El sentenciado quedó puesto a disposición del juez de ejecución de sentencias del Poder Judicial del Estado.

La presidenta del Tribunal comunicó a las partes procesales que si se encuentran inconformes con la sentencia emitida, es su derecho recurrir al recurso de casación, que el Código Procesal Penal para el Estado de Yucatán otorga.

Los hechos que los fiscales acusaron ocurrieron el 4 de septiembre de 2014, aproximadamente a las 06:45 horas cuando el sentenciado se apersonó al domicilio de su cónyuge, ubicado en la localidad de Mocochá, Yucatán y le realizó múltiples lesiones en el cuerpo, teniendo como causa de la muerte de la víctima traumatismo craneoencefálico. Cabe señalar que este caso estuvo suspendido desde agosto pasado, en espera de la resolución de un amparo.