Mérida, Yucatán.- Especialistas mexicanos trabajan en el diseño de mosquitos genéticamente modificados que, en su momento, podrían ayudar a combatir enfermedades transmitidas por vector (ETV).

Así lo informó investigador del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), Humberto Lanz Mendoza, comentar que tales estudios contribuirían a frenar dengue, chikungunya, zika y malaria.

Reconoció un aumento de estas enfermedades, en especial, las exóticas, provenientes de África, las cuales se tornarán endémicas, es decir, propias de la región y cuya presencia se sentirán todo el año.

En cuanto la investigación mencionada, indicó que mediante técnicas avanzadas de modificación genética los expertos inoculan moléculas de veneno de alacrán en huevecillos de mosquitos Aedes aegypti y Anopheles albimanus.

“El INSP desarrolló mosquitos genéticamente modificados de estos dos géneros, resistentes a la infección de estos padecimientos, que podrán ser utilizados en combinación con otras estrategias de control en México”, explicó.

En reciente visita a la capital yucateca, Lanz Mendoza resaltó que se seleccionaron moléculas tóxicas que evitan el desarrollo del virus del dengue y del parásito de la malaria en los mosquitos.

El especialista del Centro de Investigación sobre Enfermedades Infecciosas del INSP detalló que las moléculas seleccionadas fueron la escorpina, un péptido del veneno del alacrán, así como serpina.

Los genes de estas moléculas fueron microinyectados en huevecillos de los insectos por la compañía Oxitec, los cuales posteriormente se colocaron en un insectario de alta seguridad hasta llegar a la etapa adulta, subrayó.

Los mosquitos modificados presentaron un gen fluorescente, que permitió distinguirlos y, con base a ello, estudiar su comportamiento, concluyó.