Mérida, Yucatán.- En los “desechos” del pulpo nativo de Yucatán estaría la cura de la enfermedad de Alzheimer, aseveró el especialista de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Sergio Rodríguez Morales, al destacar el resultado de recientes estudios en la materia.

Según el investigador, las pruebas efectuadas hasta el momento demuestran que las personas tienen una mejoría de alivio a su enfermedad que, a su vez, va en aumento en el país.

A través de la saliva del Octopus maya, cefalópodo que habita en el Golfo de México, en especial la Península de Yucatán, se obtiene una sustancia química que mitiga los efectos del Alzheimer, propio de los senescentes.

Explicó que es una de las especies más estudiadas desde múltiples enfoques por la Unidad Multidisciplinaria de Docencia e Investigación de la (UMDI) de la UNAM.

También es una de las pesquerías más importantes de Yucatán, cuyo producto es exportado a diversas partes del mundo.

Aclaró que, en su caso, su proyecto es la obtención de neuropéptidos presentes en la saliva de este pulpo con el objetivo de evaluar su potencial como agente anti-alzhéimer.

Por lo pronto, hay un buen resultado a favor de las personas que tienen este padecimiento, por lo que se busca mejorar la técnica y efectuar otros estudios.

Informó que en la práctica de acuicultura realizada en Sisal, comisaría del municipio de Hunucmá, el 90 por ciento de la captura del octópodo se comercializa para el mercado extranjero después de ser eviscerados.

Los desechos se arrojan al mar, y aunque tiene efectos positivos en la recirculación de los componentes del agua, una parte de la evisceración que se realiza en el Puerto de Abrigo de Sisal tiene como resultado un problema higiénico.

Es decir, “repercute en el hedor y la mala apariencia de uno de los lugares de trabajo más importantes para la pesca de la localidad”, acotó el académico de la Facultad de Química de la UMDI.

Para el aprovechamiento y reutilización de las vísceras, “se pretendió encontrar moléculas que fueran activas farmacológicamente”.

Para ello, se aisló los polipéptidos, sustancia química propia de la saliva del pulpo, para encontrar aquellos que fueran neurotoxinas y taquicininas.

Ambos compuestos químicos tienen la posibilidad de disminuir la neurotoxicidad del Alzheimer, teniendo como resultado un alivio en las personas afectadas.

En México se tienen registros de mil 271 casos confirmados acumulados de Alzheimer, con un aumento del 26.2 por ciento con respecto al mismo período del al pasado, cuando fueron mil siete pacientes.

La enfermedad afecta más a las mujeres, y hasta el momento a nivel nacional es el 58.8 por ciento de este segmento, mientras que nivel estatal es el 64.3 por ciento.