Ya se sabe que las personas que padecen mal aliento están sometidas a una serie de problemas dentales, como la inflamación de las encías. Sin embargo, lo que desconocen muchas personas es que esta molestia podría conllevar a otras enfermedades más graves, como la neumonía e incluso la depresión.

Eso ocurre debido a los problemas sociales que provoca la halitosis, pues al descubrir que tienen mal aliento, muchos pacientes sienten vergüenza, malestar y terminan por aislarse de todo lo que les gusta hacer.

“Los que sufren halitosis creen que el mal olor se percibe fácilmente. Por ello, el paciente desarrolla una serie de cambios en su comportamiento, evita hablarle cerca a la gente, charla menor, lo que conlleva a un sentimiento de baja autoestima”, explica el dentista Mauricio Duarte da Conceicao, especialista en halitosis.

El siguiente paso: la depresión

Debido a esta sensación, el aislamiento social se convierte en una constante: “Terminan dejando de ver a los amigos, estudiar, o, en casos más graves, incluso dejan de salir de la casa”, afirma el experto.

Al ser la halitosis un problema fácilmente tratable, ya que en gran parte de los casos una buena higiene bucal asociada con una dieta saludable y una buena hidratación elimina el problema, se debe tener en cuenta la importancia de cuidar de la higiene bucal para mantener muy activa la vida social, algo de lo que depende el bienestar.