Mérida, Yucatán.- Ha sido testigo de momentos significativos para la historia de Yucatán: el establecimiento de las Leyes de Reforma, el gobierno de Felipe Carrillo Puerto, la Revolución Mexicana y la historia contemporánea del Estado. El 26 de septiembre de 1867 el general Manuel Cepeda Peraza declaró que sería la biblioteca del Instituto Literario del Estado, siendo vital para la formación de varias generaciones de estudiantes yucatecos.
Hoy, en su lugar de la calle 62 entre 55 y 53, a un costado del Parque de Santa Lucía, la biblioteca Manuel Cepeda Peraza reabrió sus puertas después de varios meses de remodelación. El evento convocó a representantes de diferentes instancias culturales y de los tres niveles de gobierno.
El gobierno del Estado invirtió diez millones quinientos veintiocho mil trescientos cinco pesos y también se aprovecharon los recursos del Programa de Apoyo a la Infraestructura Cultural de los Estados (PAICE). Con este aporte también se cumple el objetivo de actualizar los acervos bibliográficos de 71 bibliotecas públicas de 33 municipios de Yucatán.
Las obras físicas realizadas en la Cepeda Peraza son las siguientes: estratigrafía para definición de colores de pintura, sustitución de losa en el sótano, equipamiento de mobiliario de mesas, sillas y libreros, renovación de red eléctrica y modernización de iluminación, nuevos equipos de aire acondicionado e impermeabilización de azoteas. El tono de color de la fachada pasó de un verde claro a dorado, resaltando la majestuosidad del lugar.
“La cultura es un gran elemento generador de bienestar”, señaló el gobernador Rolando Zapata Bello durante la reapertura del lugar. “Qué herramienta más poderosa para la libertad que un libro. La cultura es un patrimonio que debemos preservar y promover”, añadió.
“Conocer nuestra cultura y vivirla también es conocernos a nosotros mismos”, detalló el mandatario, quien recorrió cada uno de los espacios dedicados a la colección yucateca, revistas, ciencias, literatura infantil e historia universal. Por esta ocasión, los bibliotecarios lucieron uniformes nuevos.
(María del Mar Boeta)
