Mérida, Yucatán.- Las instalaciones de las áreas de juegos infantiles del Paseo Verde de Mérida resultan, en muchos casos, peligrosas para los pequeños, quienes están en riesgo de sufrir alguna lesión grave.

Columpios rotos, tornillos fuera de su lugar, puntas, objetos filosos –como las tapas de los basureros–, son sólo algunos de los “síntomas” del deterioro, a poco más de un año de su apertura, en diciembre de 2015.

Los juegos de niños, asentados sobre una superficie de unos 3,100 metros cuadrados y “repartidos” en varios puntos de también llamado Parque Metropolitano de Mérida, evidencian falta de mantenimiento, nulo cuidado de autoridades o mala calidad de la construcción.

El Paseo Verde –abierto desde principios de 2014–, ubicado en el poniente de la ciudad, es considerado un modelo de recuperación de espacios públicos, pues rescató una “línea” de 7 kilómetros en la que no se permitía la construcción de asentamientos humanos debido a que por el subsuelo corren ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex).

Sobre el área también “cruzan” varios kilómetros de cables de electricidad de alta tensión que sostienen unas 20 torres.

(LectorMx)