Mérida, Yucatán.- Una persona de unos 55 años de edad, que sólo habla en lengua maya, realizó una singular protesta en la Plaza Grande de Mérida.

Para llamar la atención por supuesto acoso, el hombre se desudó y recostó en el arroyo vehicular, entre la calle 60 por 61, frente a la Catedral.

El policía segundo municipal Edgar Rodríguez López, que tomó conocimiento, informó que se trata de indigente de aquellos que deambulan en calles del Centro Histórico.

El manifestante, al parecer habitante de un municipio del sur de Yucatán, se quejó –mediante un traductor– que policías “lo maltrataban y no lo dejaban dormir”.

También dijo llamarse Víctor, al parecer afectado de sus facultades mentales.

Tras ser valorado por paramédicos, se le proporcionó ropa y fue trasladado al albergue Buen Samaritano.

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