Mérida, Yucatán.- Dirigentes de la Cámara Nacional de Empresas de Consultoría (CNEC), en Yucatán, pidieron a los regidores de Mérida verificar “en el sitio” la viabilidad de la propuesta que pretende una reducción en las dimensiones de las viviendas de interés social en este municipio.

En un escrito, señalaron que miembros de la agrupación permanecen “muy atentos” a la resolución del Cabildo sobre las modificaciones al Reglamento de Construcciones del Municipio de Mérida, para achicar los espacios de recámaras y pasillos.

“Por tal motivo, exhortamos a que ese cuerpo colegiado del municipio realice una verificación física en alguna de tales viviendas ya construidas para ‘observar’ si con los espacios propuestos, se prodigarán la seguridad y la comodidad básica para una habitabilidad razonable y digna para los moradores, que por sus necesidades adquieren dichas casas”, expusieron.

De tal manera que en tal inspección, agregaron, se puedan “guindar” las hamacas, para saber si caben con la catenaria que permita su uso sin causar lesiones en la espalda de los usuarios.

“También se podrá comprobar si en los pasillos reducidos puede circular una silla de ruedas, dando cumplimiento a lo dispuesto para atender a las necesidades de las personas que requieren usarlas”, detallaron.

Ponderaron que los promotores de esas iniciativas tienen el derecho de defender sus intereses que ellos mismos han calificado como una alternativa de “índole económica”, invocando que para acceder a los subsidios federales de la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi) se tiene que otorgar dos cuartos de recámaras.

“Por lo que otra opción es que las recámaras se hagan en segunda planta y de esa manera no tendrían que reducirse sus dimensiones. Esta alternativa atiende el tema con la visión pero “índole económica” basada en un mejor diseño y eficiencia de construcción”, reflexionaron.

En refuerzo de su posición, aludieron que existen otros aspectos dañinos de los espacios muy limitados, como refieren otras voces de la sociedad, tales como traumas psicológicos.

“Y obviamente las condiciones del clima tan caluroso requieren de una ventilación adecuada que requieren dos ventanas en cada recámara”, alegaron.

Los líderes de CNEC insistieron en un análisis objetivo con la verificación física de las dimensiones que se promulgan reducir.

“El interés de la sociedad es superior a los intereses particulares y ese encargo que los ciudadanos les ha conferido confiando en su vocación política y de servicio”, recordaron a los regidores de Mérida.

Los firmantes Carlos Alberto de Fátima Estrella Escalante, representante de CNEC en Yucatán; Javier Gustavo Cervantes Polanco, Tesorero, y Jorge Vidal López, secretario, aclararon que su propósito es contribuir con una opinión sobre un tema que tiene gran trascendencia para la calidad de vida de los habitantes.

Además, advirtieron “que la información relacionada con el asunto descrito y que el Consejo de Desarrollo Urbano ha turnado al

Cabildo invocado, no se ha demostrado claramente a la sociedad. Lo que se conoce públicamente, es lo que los medios de información y las redes sociales han expuesto”.

La misiva a los ediles tiene sello de recibida en la Secretaría del Ayuntamiento, a las 15:15 horas del 25 de mayo.

El plan original que promueven organismos federales exige que las casas de ese nivel socioeconómico tengan dos recámaras con un mínimo, cada una, de 2.70 por 2.70, es decir 7.29 metros cuadrados.

Actualmente las habitaciones son de un total de 12.25 metros cuadrados.

En una postura intermedia, el Consejo Municipal de Desarrollo Urbano recomendó recámaras de 3.00 por 3.25, que alcanzaría 9.75 metros cuadrados.

(LectorMx)