Mérida, Yucatán.- La estación de primavera concluyó el 21 de junio con un récord de temperaturas altas, las cuales, según la Comisión Nacional del Agua (Conagua), no se habían registrado en 52 años.

La dependencia informó que la etapa primaveral de este año marcó en los termómetros cifras que solo se han sentido en verano para la región peninsular. Todo ello aunado a un largo periodo de sequía que se prolongó por más de 145 días.

De acuerdo con esa medición, la temporada de primavera es la más cálida en más de cinco décadas, lo que también se refleja en las condiciones se reabastecimiento de los mantos acuíferos de la zona.

El titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma), Eduardo Batllori Sampedro, señaló que es notable para estas épocas las condiciones del cambio climático que ya se deja sentir sobre todo el territorio peninsular.

El funcionario estatal mencionó que recientemente tuvo reporte de marismas (humedales y pantanos) más prolongadas y de aumento en las temperaturas del mar en el litoral yucateco.

Está claro, explicó, que hay una afectación al clima, si bien las lluvias nos permiten recargar nuestros mantos acuíferos, en realidad son los huracanes los que permiten sanear en muchos casos nuestras reservas de agua.

La situación es que los reportes que recibimos, dijo, establecen que cada día tendremos fenómenos climáticos mucho más intensos y no sabemos hasta dónde pueda afectar.

Hemos tomado medidas, expuso, porque con eventos climatológicos más intensos hay mucha gente en peligro en las costas yucatecas.

Batllori Sampedro indicó que los 17 puertos yucatecos corren serios riesgos ante los cambios climáticos, por lo que es necesario informar debidamente a las autoridades y ciudadanos, con el fin de que tomen previsiones ante eventuales incidentes y fenómenos atmosféricos.

Refirió que en abril Yucatán registró 15 días con temperaturas superiores a 40 grados, la Secretaría de Marina observó una pleamar de metro y medio, cuando la altura promedio es de medio metro.

El punto aquí, precisó, es que debemos hacer mucho más por atender los problemas por estos cambios climáticos, por ello estamos monitoreando con mayor detenimiento las condiciones del agua, los problemas de contaminación y también las zonas de riesgo de la costa.

(JCN)