Mérida, Yucatán.- Este 4 de enero se cumplió un mes de la tragedia en las obras de construcción del llamado Paseo 60, en Mérida, un complejo comercial y turístico, ubicado en la zona hotelera de la capital.

Hasta ahora, las autoridades no han informado del resultado de los peritajes para determinar la causa del desplome de varios pisos en construcción, en el que murieron aplastados 5 obreros.

La mañana de este jueves, se comprobó que la obra ya fue liberada por las autoridades ministeriales, luego de permanecer casi un mes cerrada. Trabajadores entran y salen del lugar, al igual que los camiones que meten y sacan material de construcción.

Como informamos, el 4 de diciembre de 2017, cerca de las 17:00 horas (5 de la tarde), varios pisos en la construcción de lo que sería un hotel dentro del complejo comercial Paseo 60, ubicado a espaldas del hotel Hyatt, se desplomaron. En el accidente, fallecieron 5 obreros.

La obra quedó desde entonces en el centro del huracán, por varias razones; primero, porque una de las hipótesis es que se había caído por malas prácticas en la edificación; segundo, porque la búsqueda de cuerpos prácticamente acabó al día siguiente, pero no se había encontrado a uno de los obreros.

Las protestas de los familiares de uno de los obreros desaparecidos obligaron a las autoridades a reanudar la búsqueda de restos humanos; finalmente, dieron con el cuerpo de la quinta víctima mortal.

Poco después de la tragedia, trascendió que las autoridades establecieron entre las líneas de investigación un error humano, el de un operador de grúa, quien golpeó la estructura y la desplomó. Sin embargo, las autoridades, nunca confirmaron la versión.

De hecho, al cumplirse hoy un mes de la tragedia, se buscó la versión oficial de la Fiscalía, pero la oficina de prensa no contestó a los llamados.

Sin embargo, la obra fue liberada desde los primeros días del año; trabajadores que esperan entrar de nuevo a trabajar a la obra comentaron que la construcción se abrió desde el pasado 2 de enero. Sin embargo, no fue sin hasta hoy jueves 4 que se observó movimiento de trabajadores dentro y fuera de la obra.

Durante la investigación, la construcción estuvo acordonada y vigilada las 24 horas del día por una patrulla de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP); este jueves, la patrulla ya no estaba, y las cintas que impedían el paso se había retirado. Ni siquiera había guardias de seguridad privada en las puertas, como se había observado desde la fecha del suceso.