Mérida, Yucatán.- Más de 450 ciudadanos de Yucatán que cambiaron su domicilio a Quintana Roo, para poder votar a favor del Partido Revolucionario Institucional (PRI), solo recibieron una “amonestación pública” por parte de la autoridad electoral.

Los que sí recibieron sanción fueron las dos personas -a las que no identifica; sólo menciona sus nombres de pila- que supuestamente convencieron a los “turistas electorales” de mudarse a Quintana Roo.

También sancionó al partido involucrado, es decir, al Revolucionario Institucional, con una multa de 323,700  pesos porque comprobó que el instituto político fue “omiso” y no evitó la conducta ilegal de los votantes.

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Este es la primera vez que el INE sanciona esta práctica llamada popularmente “turismo electoral“, es decir, cambio de domicilio de la credencial para votar, con la intención de participar en una elección un estado o lugar diferente al que le corresponde.

En un comunicado, el INE señala, entre otros aspectos que:

  • “El PRI incurrió en la omisión de no prevenir o evitar que diversos ciudadanos fueran trasladados, inducidos o instigados para que realizaran (en 2013) su trámite de cambio de domicilio ante el RFE de Yucatán a Quintana Roo, con el propósito de obtener la Credencial para Votar con Fotografía, proporcionando un domicilio donde no residían”.
  • Las personas sancionadas, a las que sólo menciona como “Juana Margarita y Miguel Arcángel”, tendrán que pagar 3,238 pesos  y 32 mil 380, respectivamente, por “inducir a ciudadanos a realizar el trámite de cambio de domilicio ante el RFE de Yucatán a Quintana Roo”.

En total, fueron 467 ciudadanos que cambiaron su domicilio antes de las elecciones para poder votar en el vicno estado, según la investigación de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade).

¿Por qué estos turistas electorales no fueron sancionados? Porque el INE -así lo expuso la consejera Adriana Favela, presidenta de la Comisión de Quejas y Denuncias, dijo que los “instigadores” se aprovecharon de la pobreza de las personas para convencerlos de que cambiaran su domicilio.