Ciudad de México.- El sector agropecuario de Yucatán, golpeado primero por la pandemia sanitaria y luego por las lluvias e inundaciones del 30 de mayo al 7 de junio, enfrenta ahora la falta de recursos federales.

A la negativa del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) de incluir un subcomité de Infraestructura Agrícola para apoyar a los productores damnificados, se suma la inmovilidad de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).

Después que el Fonden canalizó a la Sader la atención del tema de las afectaciones en el campo, ésta alegó que su Fondo de Cambio Climático y Contingencias se encuentra en ceros y no existe dinero para apoyar al estado en la materia.

Según la Sader, en el presente ejercicio fiscal no se opera este esquema, ni el componente de atención a siniestros u otra estrategia que estuviera alineada.

Además, el gobierno federal canceló el seguro catastrófico de Yucatán, con el cual se ayudaba a los pequeños productores en caso de perjuicios climáticos como sequías, vientos, trombas, inundaciones o huracanes.

Así, este año los hombres y mujeres de campo no cuentan con ese respaldo y permanecen en el desamparo.

Pese a ello, el gobernador Mauricio Vila Dosal entregó un oficio al titular de la Sader, Víctor Villalobos Arámbula, para que, ante la imposibilidad de atender la emergencia con recursos propios para desastre naturales, solicite al Fonden lo necesario para solventar la situación crítica.

El mandatario citó lo dispuesto en el artículo 23 del Acuerdo por el que se emiten las Reglas Generales del Fondo de Desastres Naturales –que ya fue solicitado–, y que estipula que la Sader se encuentra facultada para solicitar apoyo del Fonden cuando los recursos del Programa de Atención a Contingencias Climatológicas se encuentren ejercidos en su totalidad o resulten insuficientes.

En la evaluación preliminar, la pérdida total contabilizada por el paso de la tormenta tropical “Cristóbal” alcanza más de 5 mil 422 millones de pesos, de los cuales dos mil 066 millones de pesos corresponden al renglón agropecuario, mil 389 millones a vivienda y mil 968 millones en infraestructura.

Más de 95 mil hectáreas de cultivos, en unos 60 municipios, fueron arrasados y se calcula que el 85 por ciento de ellos en pérdida total.

Vila Dosal se reunió también con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, y con el consejero jurídico de la Presidencia de la República, Julio Scherer Ibarra, a quienes informó sobre la situación que viven las familias yucatecas y presentó los argumentos jurídicos de por qué el sector agrícola debe ser considerado dentro del Fonden.

(LectorMx)