Mérida, Yucatán.- Una semana después de iniciada la campaña por la Presidencia Municipal de Mérida, el candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Jorge Carlos Ramírez Marín, se lanzó en contra de su principal adversario en la contienda.

Con alusión directa al alcalde con licencia Renán Barrera Concha, el priísta atacó la base y sustancia del proyecto de su oponente del PAN, quien busca un tercer período al frente del Ayuntamiento de Mérida.

“Es la hora de dar un cambio definitivo, es la hora de ser los protagonistas del futuro por eso frente a ustedes este compromiso: No Reelección”, subrayó.

“Este equipo trabajará tres años y que en esos tres años demostraremos lo que se puede hacer; no trabajaremos para reelegirnos, trabajaremos para que los cambios sean inmediatos, para que allá donde la pobreza mental y la mezquindad ven imposibles nosotros demostremos todo lo que se puede cambiar, todo lo que se puede hacer por Mérida”, afirmó.

En la plaza grande, junto con integrantes de su planilla y representantes del PRI y del PRD –en alianza–, remarcó el compromiso de que no buscarán de manera consecutiva otra vez el cargo.

“Nos bastan tres años para demostrarle a los yucatecos cómo se gobierna…”, puntualizó el parlamentario en receso.

“Este es un clamor en la sociedad y la apuesta de los que hoy gobiernan es venderle a la sociedad que no hay más alternativa que ellos…”, abundó.

Frente al palacio municipal, presumió sus experiencias como presidente del Congreso de la Unión, en dos ocasiones, y secretario nacional de Desarrollo Urbano en el sexenio de Enrique Peña Nieto.

“Pero tratarán de hacernos creer que no hay más remedio que ellos, es una propuesta muy pobre: Más de lo mismo, es una propuesta muy pobre decirte con lo que he aprendido en estos seis años te voy a dar respuesta a los próximos tres, la verdad es exactamente al revés, el que no te ha dado respuestas en seis años no te las va a dar en siete, ocho o nueve, esa es la verdad”, sentenció.

Ramírez Marín reflexionó que Mérida necesita de mantenerse efectivamente con la mira puesta en seguir creciendo con justicia, de lo contrario ésta cada vez más visible brecha entre pobres y ricos, entre los que tienen oportunidades y los que no tienen ninguna, entre los que pueden atender su salud y los que tienen que esperar la muerte, entre los que tienen para gozar y los que tienen que vivir sufriendo.

“Esa brecha va a acabar con nuestro futuro, nos va a poner a todos en el mismo destino, la quiebra absoluta de los valores y la esencia de la ciudad, el fin completo de esto que hemos adorado a lo largo del tiempo y que hemos cuidado tanto: la fuerza de nuestro tejido social por sus valores comunitarios.

“Seguir comprando votos destruye el alma de la sociedad yucateca, su civismo, trata de que de acabar con lo más valioso de esta ciudad: su ciudadanía; creer que con ofrecerle a la gente bienes porque se está muriendo de hambre, garantizamos el futuro de la ciudad, es una equivocación, garantizamos el futuro de los mismos, garantizamos el futuro de sus amigos, garantizamos el futuro de su grupo político y de su grupo de negocios, pero cancelamos las oportunidades de los jóvenes y de las mujeres de Mérida que no se tienen la culpa de lo que hemos hecho mal los gobernantes”, dijo en la parte final de su discurso.

En entrevista posterior, reprobó el planteamiento de repetir en la comuna de Mérida para consolidar supuestos avances.

“En tres años veremos los cambios importantes que se tienen que hacer. En tres años, no se necesitan nueve años.

“Mérida no es la escuela de nadie…, qué a todo dar, qué buena gente… ya aprendí, ahora sí estoy listo. Seis años es mucho tiempo”, sostuvo.

Y reiteró que, de triunfar, el 1 de septiembre serán retirados los maceteros del centro de la ciudad, se tomarán decisiones en el caso específico de las ciclovías y se regresarán los paraderos de transporte urbano a sus ubicaciones originales.

(LectorMx)