Mérida, Yucatán.- Los manglares en México permanecen en buen nivel de conservación, pese a las afectaciones que se han documentado en las últimas décadas.

Dadas las actividades de conservación que se llevan a cabo en el país, éste se mantiene como el cuarto en el mundo con mayor superficie de estos sistemas naturales.

Tales conceptos se plantearon en el Taller de Medición de Carbono en Manglar, que inició hoy y concluirá el jueves en Mérida.

En la apertura, se aludió al trabajo de México en el manejo y protección de dichos ecosistemas, así como de su importancia ecológica y económica.

México tiene la cuarta superficie de manglar en el planeta, por debajo de Indonesia, Brasil y Australia.

El coordinador en México del Programa Internacional del Servicio Forestal de Estados Unidos (USFS-IP), Rafael Flores Hernández, abordó la alta productividad y aporte de nutrientes de esos espacios costeros.

Además, junto con otros ecosistemas del litoral, es generador de numerosos servicios ecosistémicos, entre ellos la captura de gases de efecto invernadero que ayuda a reducir el impacto del cambio climático.

Los manglares, al igual que los bosques, explicó el entrevistado, “son los grandes almacenes de carbono, por lo que su conservación es esencial para garantizar la calidad de vida”.

En el encuentro, indicó, se medirá la biomasa que actualmente tiene un manglar para calcular el carbono que puede captar, así como el volumen de emisión de oxígeno.

“Al reforestar un manglar se garantiza la captación de más carbono, pero cuando se daña este sistema, la emisión de gases de efecto invernadero seguirán en la atmosférica, alterando las condiciones climáticas del planeta”, advirtió.

El USFS-IP fomenta el desarrollo de programas para la conservación del manglar que en el caso mexicano su estado de salud varía dependiendo de la entidad federativa.

Por ejemplo, Yucatán registra mejor conservación en la Reserva de la Biosfera de Celestún, seguido de la de Ría Lagartos y la Reserva Estatal de Dzilam de Bravo.

Sin embargo, reconoció, existe un notable daño en los manglares que están en zonas urbanas, de ahí la importancia de la conservación, restauración y reforestación de esas áreas.

En el Taller participan investigadores de Colombia, Ecuador, Guatemala, Honduras y México, cuyo anfitrión es la Unidad Mérida del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav).