Mérida, Yucatán.- Una propuesta para que el Ejecutivo de Yucatán investigue a fondo las violaciones a los derechos humanos cometidas por la policía estatal en la comisaría de Chablekal, el pasado 3 de mayo, fue frenada en el Congreso del Estado.

El planteamiento presentado por el diputado local Elías Lixa Abimerhi, no prosperó por el rechazo de la mayoría del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

“El gobierno tiene la responsabilidad de garantizar el estado de derecho, pero nunca, bajo ningún motivo o circunstancia puede hacer el uso excesivo de la fuerza pública o política en contra de los ciudadanos”, argumentó el panista.

En la sesión de instalación del tercer período ordinario de sesiones, el legislador llevó la iniciativa de punto de acuerdo ante el pleno, con el fin de que se deslinden responsabilidades y se sancione a quienes resulten con responsabilidad por los hechos violentos.

“Es urgente que el gobierno explique sus criterios para conceder la fuerza pública, pues sabemos de cientos de casos en donde incluso alcaldes la solicitan por asuntos de interés general siendo que no se concede y sí se otorga para desalojar a un adulto mayor (de 94 años de edad), evidentemente en situación vulnerable”.

Tras el rechazo de parte de la Fracción Parlamentaria del tricolor, al considerar que es un asunto “politizado”, Lixa Abimerhi defendió la importancia de abrir la discusión sobre un tema de inminente orden social.

“Cuando se abusa de la fuerza pública, cuando se excede el ejercicio gubernamental, cuando se violan garantías de personas, cuando en un altercado social, hay una inconformidad en una comisaría, estamos obligados a ocuparnos del tema”, esgrimió.

En apoyo del asunto, su compañera de bancada Beatriz Zavala Peniche, refirió que existen testimonios que indican un abuso de poder de los elementos de la Secretaría estatal de Seguridad Pública en la diligencia judicial.

“No se puede decir que se está a favor en algo y votar en contra de eso mismo”, replicó.

“Nuestra responsabilidad como diputados es también ser contrapeso de otros poderes”, dijo, al alertar de riesgos de caer en el autoritarismo.

“Irrumpir en un domicilio sin orden judicial, lanzar gases lacrimógenos en donde se encontraban niños y ancianos, llevar detenidos a menores de edad y detener a defensores de derechos humanos, nos parece que es actuar fuera de la ley”, subrayó.

Del suceso de Chablekal, resultaron seis personas detenidas, entre ellos dos representantes de organizaciones promotoras de los derechos humanos, y varios lesionados.