Mérida, Yucatán.- A la deuda formal documentada en el arranque de la actual administración de Quintana Roo, el nuevo gobierno estatal ha encontrado más pasivos, como el de los fideicomisos de promoción turística y otros.

Carlos Joaquín González, gobernador de esa entidad, reveló hoy que los pasivos totales rondan los 31 mil millones de pesos, de los cuales 22 mil millones de pesos corresponden a los empréstitos con instituciones financieras.

A esto se suman unos tres mil millones de pesos en pagos pendientes a proveedores, las retenciones de trabajadores no cubiertas a las instancias respectivas y los incumplimientos en los instrumentos de promoción turística.

Sin mencionar a su antecesor, el priista Roberto Borge Angulo, acusado de corrupción y malos manejos de recursos públicos, el mandatario ofreció que se llegará hasta las últimas consecuencias para castigar a los responsables.

“Uno de los puntos más importantes por los cuales Quintana Roo decidió por este cambio es sin duda el tema de la transparencia, la rendición de cuentas, y es desde donde debemos iniciar.

“Y evitar por supuesto la impunidad que se daba en forma muy intensa en Quintana Roo y que hoy debe de ser erradicado, debe de darse resultados sobre este tema”, dijo en entrevista.

A la pregunta de si conoce dónde se encuentra Borge Angulo, Joaquín González respondió que no exactamente, aunque estimó que permanece en el país.

“Creo que está en Quintana Roo”, puntualizó.

En el caso de los viajes al extranjero durante la gestión anterior, consideró que “las comitivas eran muy amplias”, por lo que vale la pena auditar también los precios y montos utilizados para tener argumentos suficientes.

(LectorMx)