Mérida, Yucatán.- El reloj aún no marcaba las ocho de la noche y las mesas ya estaban ocupadas.  El delicado olor de la gastronomía francesa se sentía en el aire, atrayendo la atención de quienes simplemente “pasaban por ahí”.

¡Llegó el Beaujolais!, expresaba Renaud Lignelet mientras servía el vino.

La celebración del Beaujolais Nouveau  en Mérida nuevamente convocó a cientos de personas en el hotel Ibis, por iniciativa de la Alianza Francesa.

Por supuesto, la fiesta  multicultural incluyó crepas, panes, croissants y repostería fina, logrando que el jardín exterior del centro de hospedaje se convirtiera en un pedacito de Francia dentro de Paseo de Montejo.

Desde hace un par de años, la casa de estudios abrió sus eventos a la comunidad yucateca.

Lignelet, propietario de Les Vins De Moliere y uno de los patrocinadores del evento, invitaba a los asistentes a probar el Beaujolais, explicándoles sus características, recomendaciones de maridaje y compartiendo los detalles de su elaboración. El Burdeos también estaba a disposición de quienes desearan probarlo.

El vino es elaborado con uvas Gamay en la zona de Beaujolais, Francia. Se distingue por fermentar en un período corto, sólo seis semanas después de la cosecha, ofreciendo a los amantes de la bebida un producto delicado y ligero. Son perfectos para degustar con crepas y quesos porque son fáciles de beber.

En las últimas décadas esta celebración ha tomado carácter mundial, efectuándose en varias partes del mundo. Los viñedos datan desde el tiempo de los celtas y romanos, empleando un millón cuatrocientos mil hectolitros de uva para producir más de 36 millones de botellas que, según las leyes de Francia, deben descorcharse un minuto después de la media noche.

francia2(María del Mar Boeta)