Mérida, Yucatán.- La mejor manera de cobrarle las facturas a los gobiernos irresponsables con el manejo de los recursos públicos es con el voto, nunca con la violencia, señaló la senadora Rosa Adriana Díaz Lizama, en un convivio con vecinos del municipio de Tetiz.

Al explicar los motivos del gobierno federal al imponer el aumento de los combustibles, la senadora por Yucatán indicó que el mismo gobierno alienta la confusión, de modo que pocas personas saben verdaderamente cuáles son las causas y, lo más importante, quiénes son los responsables.

—El aumento de las gasolinas se debe al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), que los legisladores del PAN votamos en contra, pero que fue autorizado gracias a la mayoría del PRI.

—Aquí en Yucatán, lo mismo pasa con el reemplacamiento. Ahora van a tener que pagar placas nuevas hasta las personas que tienen un auto viejito, que a lo mejor es su herramienta de trabajo.

—Quiero decirles que, aquí y en México, el PRI es mayoría y con esa mayoría el PRI puede imponer las decisiones que quiera. Los priístas son los responsables del gasolinazo y también del reemplacamiento. Es importante que se sepa bien —destacó.

Rosa Adriana Díaz subrayó que los gobiernos priístas simplemente no pueden ni quieren dejar de recibir recursos de los ciudadanos para gastar electoralmente sin ninguna responsabilidad.

—Mientras que los gobiernos panistas hacen reajustes para cuidar el dinero, los gobiernos emanados del PRI sólo le piden a los ciudadanos que se aprieten el cinturón, pero ellos mismos simplemente no lo hacen.

—Quiero decirles que ningún gobierno federal y ningún gobierno estatal ha tenido tanto dinero ni ha ejercido tantos recursos públicos como la administración de Enrique Peña Nieto y la de Rolando Zapata Bello —puntualizó.

—En todo el país, hay 3,500 programas sociales, es decir hay 111 programas sociales en promedio por cada estado, pero no hay 111 necesidades humanas diferentes, de modo que hay muchos programas sociales duplicados y a veces hasta triplicados —sostuvo.

—El gobierno tiene la mala costumbre de convertir los programas sociales en premios electorales para garantizar la codependencia de la gente pobre.

—Lo malo es que esa estrategia electorera la pagamos todos, vía impuestos, llámese IVA, Impuesto sobre la Renta (ISR), IEPS o hasta placas nuevas —aseveró.

En ese sentido, la legisladora yucateca hizo un nuevo llamado al gobierno federal y estatal para reducir el gasto público y sobre todo, reorientarlo a donde de verdad se necesita.

(Comunicado)