Playa del Carmen, Quintana Roo.- La oficina consular de Estados Unidos en este destino turístico reabrió hoy sus puertas para la atención a sus ciudadanos.
Ello a pesar de que se mantiene la restricción del uso de transbordadores de Playa del Carmen a Cozumel y viceversa.
Desde esta mañana, la agencia ubicada en Plaza Península, sobre la carretera federal a Chetumal, volvió a atender a turistas y residentes estadounidenses en sus trámites.
El miércoles 7 de marzo se informó del cierre hasta nuevo aviso de esa representación del vecino país del norte en Playa del Carmen, debido a “una amenaza a la seguridad”.
Sin embargo, la restricción de viajes en ferrys hacia la isla de Cozumel y a Playa del Carmen permanece para empleados norteamericanos.
La medida fue adoptada luego de la explosión en una embarcación de la empresa Barcos Caribe, el 21 de febrero pasado, propiedad de la familia del ex gobernador Roberto Borge Angulo, hoy preso en el Centro Federal de Readaptación Psicosocial (Ceferepsi) de Morelos.
Ni terrorismo y narcos
En conferencia de prensa, la tarde de ayer domingo, la Procuraduría General de la República (PGR) descartó que la explosión se haya dado por un atentado terrorista o tenga relación con grupos del crimen organizado.
Alberto Elías Beltrán, subprocurador Jurídico y de Asuntos Internacionales de la PGR, señaló que derivado de las investigaciones se concluyó que el origen de la explosión fue con un “artefacto rudimentario o de fabricación casera”.
“Queda descartada la autoría por parte de una organización terrorista o de la delincuencia organizada”, dijo.
Respecto a grupos criminales, Elías Beltrán lo descartó porque una escalada de ese tipo es contraria a sus intereses, pues actos como éstos provocan aumento en los niveles de seguridad y de atención de las autoridades en esa materia.
(Gonzalo Zapata)
