Mérida, Yucatán.- Nada detuvo el gusto por consumir carnitas, cascarita y otros derivados del cerdo, ni siquiera la intensa lluvia que arreció esta tarde en el Tercer Festival de la Chicharra, a la que concurrieron más de 14 mil meridanos.
Las 200 mesas fueron insuficientes para albergar a los comensales que acudieron a degustar las más de dos toneladas de carne de cerdo que se pusieron a la venta en 14 expendios distribuidos en el barrio de Xcalachén.
Las prolongadas filas para adquirir el producto, el cielo nublado, la precipitación pluvial, así como la escasez de sillas –cerca de 800– no fueron obstáculos para la tumultuaria asistencia a la mega comilona.
Desde antes del mediodía, los meridanos se formaron para adquirir sus carnitas y chicharrón, con el fin de compartirlas con la familia en alguna de las mesas instaladas por los organizadores del evento, que superó todo tipo de obstáculos para salir avante.
Al igual que en las dos ediciones anteriores, la gente mostró gran ánimo y con hambre para devorar los platillos.
Autoridades municipales y las empresas expendedoras ratificaron el éxito del Festival de la Chicharra como detonante de la actividad comercial del sector que comprende la calle en 95 de la 62 a la 66 y de la 64 a la 95.
Antes de la hora fijada para el término, a las 17:00 horas, se agotaron las viandas de cerdo, lo que ratificó la aceptación de este encuentro comercial y familiar.
La alcaldesa de Mérida, María Fritz Sierra, y la directora de Turismo, Carolina Cárdenas Sosa, recorrieron los puestos de chicharronería y saludaron a los comensales durante todo el trayecto desde la calle 64.
El subdirector de Desarrollo Económico, Antonio González, estimó que a esta peculiar jornada gastronómica acudieron cuando menos 14 mil personas, misma cantidad del año pasado, quienes consumieron poco más de dos toneladas de productos y derivados del cerdo.
Resaltó que de los 10 expendios participantes, los tres del rumbo “La Lupita”, “La Flor de Xcalachén” y “El Amigo de Xcalachén” ya cuentan con su debido registro de nombre y razón comercial al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI).
Lo anterior significa que ante el éxito económico que han obtenido dichos establecimientos, nadie deberá utilizar sus nombres para replicarlos y vender productos cárnicos explicó.
El éxito comercial y la derrama económica están garantizados con este festival de la chicharra, resaltó el servidor público al destacar los logros de esta iniciativa del Ayuntamiento de Mérida, los oferentes y los residentes del barrio de Xcalachén.
También participaron en la venta de carne de cerdo “La Guadalupana”, “El Campeón”, “El Roble”, “La Gloria”, “Cauich”, “La Ex Fuente Maya” y “El Mercadito de Mulchechén”.
(Jesús Mejía)
