Cancún, Quintana Roo.- A fin de evitar el arribo masivo de sargazo a las playas del principal destino turístico del país, la empresa Goimar comenzó con el monitoreo de los primeros 200 metros de las barreras de contención.

Se espera que para finales de este mes, sea un kilómetro de la malla la que esté instalada desde Punta Nizuc hacia Punta Cancún.

Incluso, la misma compañía procederá en próximos días con los estudios de corrientes en Solidaridad (Playa del Carmen) para colocar los flotadores, con el fin de que la talofita se redireccione a otras corrientes marinas o bien cumpla con su ciclo de vida en el mar.

Edgar Rivera, coordinador operativo de Goimar, explicó que el objetivo es que tan sólo en este destino turístico (Cancún) cuente con 8.3 kilómetros de malla.

“La idea de que el sargazo siga otras corrientes, no es que llegue a otras costas, sino que cumpla su ciclo de vida en el mar y muera naturalmente, desapareciendo como materia orgánica sin causar ningún daño ecológico”, dijo.

De acuerdo con especialistas de Goimar, se estima que menos del 50 por ciento de las algas que se generan en el mar arriban a las costas de Quintana Roo.

“Se había recomendado que las barreras fueran colocadas a 45 grados de Punta Nizuc, considerando las corrientes, pero con el viento descubrimos que podía arrastrar más a las costas”, agregó Alejandro Bravo, oceanólogo.

Precisó que las barreras funcionan, pero la colocación debe ser paralela a la costa para que sin importar la dirección en la que llegue el viento se proteja el litoral.

Las “barrera antisargazo”, como se le ha denominado, es un flotador con una lona que va unida cada 30 metros, con un faldón dentro del agua de 25 centímetros y de allí una malla de 1.20 metros.

Ésta es visible para cualquiera, incluida la fauna marina, para mantener la orientación del sargazo lejos de las costas.

(Gonzalo Zapata)