Mérida, Yucatán.- La indignación por los recientes asesinatos de una niña, de seis años de edad en el municipio de Tahdziú y de una mujer, madre de dos bebés en la ciudad de Kanasín, crece.
Aunque en escaso número, líderes sociales expresaron públicamente su repudio y respaldaron la demanda de justicia a los familiares de las víctimas.
Ligia Teresita Canto Lugo, madre de Emma Gabriela Molina Canto, asesinada en marzo de 2017, en uno de los casos de mayor resonancia nacional, participó en la caminata y concentración del parque de San Juan a la Plaza Grande de Mérida para expresar su solidaridad y su exigencia porque se aclaren los crímenes.
En ese contexto, advirtió que la sociedad no puede permanecer indiferente a estos sucesos.
Otras activista también se hicieron presentes en la reunión a la que convocaron mediante redes sociales, entre ellas integrantes del Comité Latinoamericano y del Caribe para la Defensa de las Mujeres y de la red de Mujeres por Yucatán.
Los asistentes, con predominio de mujeres vestidas de blanco, llevaron veladoras para patentizar su conmoción por los hechos ocurridos la semana anterior, en el ultraje y estrangulamiento de la menor.
Los presuntos responsables en ambos casos han sido detenidos por orden de juez, para deslinde de responsabilidades.
Las manifestantes mencionaron que convocarán de nueva cuenta el próximo sábado a una movilización similar a la que esperan mejor respuesta de agrupaciones y ciudadanos en general.
(Jesús Mejía)
