Mérida, Yucatán.- Una de las creaciones musicales que transforma los teatros y las salas de concierto en espacios apoteósicos de ovaciones y expresiones de euforia es Carmina Burana, del alemán Carl Orff, que será presentada por la Orquesta Sinfónica de Yucatán (OSY) los días 13, 14 , 15 y 16 de diciembre.

El director artístico de la OSY, Juan Carlos Lomónaco, y la directora del coro, María Eugenia Guerrero Rada, así como los solistas cantantes reconocieron que la cantata musical representa un verdadero reto, ya que entraña dificultades y exigencias de interpretación que, confían, serán superadas.

En rueda de prensa, la soprano Anabel de la Mora, el tenor Miguel Ángel Mena y el barítono Enrique Ángeles, que desempeñarán las partes solistas, aceptaron que existen variaciones del clima y variación de registros vocales a alcanzar, sobre todo en la parte femenina, que requiere tesitura distinta a su coloratura de soprano lírica.

El director del Fideicomiso Garante de la OSY, Miguel Escobedo, expuso que los tres cantantes invitados son los ideales para esta magna obra estrenada en 1937, ya que anteriormente la han interpretado con otras orquestas y escenarios, por lo que son garantía de éxito en esta ocasión.

La parte coral estará integrada por 80 cantantes de todas las tesituras, además de un coro de 12 niños de siete a 13 años de edad, en tanto que la sinfónica integrada por 67 músicos será reforzada con dos pianos y sus intérpretes y un percusionista más. En total habrá 165 personas que aportarán lo mejor de sí.

La dotación orquestal y coral responderá a las necesidades de interpretación de esta obra de Carmina Burana, creada después de la conmoción musical que provocó en 1913 dentro de la corriente del modernismo el estreno La Consagración de la Primavera de Igor Strawinsky, comentó Lomónaco.

Carmina Burana es un caso excepcional en la historia de la música. Se trata de 22 poesías líricas en latín familiar, salvo dos y media en alto alemán, y otra en latín entreverado de provenzal. Muchas de ellas anónimas, fueron encontradas en el siglo XIX en el monasterio de Benediktbeuern de Baviera por el investigador J. A. Schmeller.

El ciclo de poemas constituye una típica colección de gozosos cantos de los goliardos medievales, frailes retirados de algunas abadías benedictinas, compuesto en cinco partes: el triunfo de la fortuna, una escena de la primavera, unas danzas en el prado, una escena en la taberna y una conclusiva corte de amor.

El maestro Lomónaco refirió que los textos de la cantata escénica causaron controversia por sus atrevidos versos y sátiras medievales, los cuales fueron objeto de prohibición y censura. La obra es interpretada de manera preponderante por el coro en latín. Su fragmento más conocido es el O Fortuna, que constituye la primera parte del preludio y que se repite al final de la composición.

Carmina Burana es una de las obras más interpretadas del siglo XX y sin duda lo será en esta centuria, puntualizó el director artístico, quien invitó al público a no perderse esta obra que será presentada en el Teatro José Peón Contreras a partir de mañana y hasta el domingo a las 20:00 horas.

Los boletos están disponibles en las taquillas del teatro en 200, 300, 350 y 400 pesos, o bien pueden realizar la compra en línea a la página web www.sinfonicadeyucatan.com.mx

(Jesús Mejía)