Mérida, Yucatán.- La Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) se verá obligada a un crecimiento más pausado, aunque no prevé afectaciones a proyectos fundamentales, derivado del recorte en su presupuesto para este año que inicia.
Esa fue la definición del rector José Jesús Williams, luego de rendir protesta en el cargo para un segundo período, ahora del 2019 al 2022.
En conferencia de prensa, explicó que mientras la Federación concedió un incremento del 2.6 por ciento, en comparación con lo ejercido en 2018, el Gobierno del Estado aplicó una disminución de poco más de 6.45 por ciento.
“Tenemos la oportunidad de que podamos ir creciendo y seguir trabajando en estos proyectos, nada más que de una manera mucho más lenta”, reconoció.
Frente a esa circunstancia, anotó, la UADY tendrá que apostar “a su gran fortaleza”, que son los servicios públicos que ofrece, con el propósito de ampliarlos.
“No nos vamos a esperar a que el recurso llegue, sino tenemos nosotros que, como universidad, que reconvertirnos en el sentido de buscar y generar estrategias que nos permitan obtener recursos, y estos recursos poderlos destinar a los proyectos prioritarios que tiene nuestra universidad, con la intención de irlos cumpliendo a la brevedad posible”, dijo.
Para lograr esto, fijó como necesario seguir fortaleciendo el área de vinculación, en la idea de captar “recursos frescos”.
El funcionario descartó un eventual aumento en los derechos que cobra la UADY, ya que hacerlo –ponderó– repercutiría, golpearía los bolsillos de la sociedad yucateca.
En materia de nuevas contrataciones, indicó que estarán condicionadas a un análisis para determinar su viabilidad financiera, pero sobre todo para mantener la calidad de la enseñanza a los 26 mil estudiantes.
Respecto al inminente inicio de las negociaciones salariales con los dos sindicatos de la UADY, aclaró que se encuentran a la espera de que la Secretaría de Educación Pública marque “la base” o el tope para ese tema.
El Dr. Williams adelantó que en esta nueva etapa de su gestión implementará una reestructuración en el organigrama de la casa de estudios, con miras a una mayor eficiencia.
Ante los integrantes del XXVII Consejo Universitario, reunidos en el Auditorio “Manuel Cepeda Peraza” del edificio central, delineó los ejes que articularán el rumbo de la institución para responder a los retos que imponen los cambios sociales, económicos, políticos y culturales de este siglo.
En su mensaje, en presencia del gobernador Mauricio Vila Dosal, sostuvo que la tarea que se tiene adelante es compleja pero factible.
Sus colaboradores más cercanos son: Celia Rosado Avilés, secretaria general; Elsy Mezo Palma, directora de planeación y efectividad institucional; Renán Solís Sánchez, abogado general; Carlos Estrada Pinto, director general de desarrollo académico, y Manuel Escoffié Aguilar, director general de finanzas y administración.
(LectorMx)