Mérida, Yucatán.- De las tomas de agua en viviendas de la capital yucateca y su área conurbada emana un cóctel nocivo para la salud humana y quizá para otros animales.
Muestras recogidas en 28 puntos de los municipios de Mérida, Kanasín, Umán, Conkal, Ucú y Baca arrojaron positividad del 85 al 90 por ciento a plaguicidas organoclorados: Heptacloro, Lindano, Aldrin y Endosulfan, entre otros.
Sin embargo, lo más grave es que en el cien por ciento de los casos los niveles de concentración (medidos en partes por millón) están por arriba de las normas oficiales mexicanas y mucho más de lo permitido por la Organización Mundial de la Salud, la Unión Europea y Estados Unidos.
Un equipo encabezado por el doctor Ángel Polanco Rodríguez, del Centro de Investigaciones Regionales (CIR) de la Universidad Autónoma de Yucatán, tuvo a su cargo el estudio “Contaminación del agua potable en Mérida y zona metropolitana”.
Los datos de monitoreo, que se aplicó en 13 localidades de los seis municipios, se encuentran en revisión y en un par de semanas serían enviados a una revista científica.
La difusión formal se estima para dentro de dos o tres meses, según lo que determine un comité de expertos, responsable la publicación.
En los últimos años, diversos trabajos de investigación han arrojado la presencia principalmente (en porcentajes mayoritarios) de compuestos de Heptacloro y Lindano, en sangre, leche materna y agua de consumo.
(LectorMx)