El Fondo de la Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) no se anda con juegos. Y sus portavoces acaban posicionarse firmemente; en contra de la tendencia cada vez más grande de los movimientos antivacunas.

Cifras indican que padres fueron responsables de que niños no recibieran vacuna para la influenza

Desde el año 2013 hasta la fecha fueron los padres de muchos niños los cuales rechazaron la vacuna contra la influenza por no creer que esta tuviera afecto.

La directora del organismo, Henrietta Fore, acaba de publicar en el blog oficial de las Naciones Unidas un comunicado en donde marca la postura sobre este fenómeno que podría poner en riesgo la vida de millones de niños:

Los datos erróneos sobre las vacunas es tan peligrosos como una enfermedad. Se propagan rápidamente y representa una amenaza inminente para la salud pública.

A pesar de la clara evidencia de la capacidad de las vacunas para salvar vidas y controlar enfermedades, millones de niños pequeños en todo el mundo se quedan sin vacunar.

Los grupos antivacunas han explotado eficazmente las redes sociales, creando confusión y alimentando temores entre los padres, lo que podría socavar el progreso para extender la vacunación a todos los niños.

La Unicef destaca a la complacencia, el escepticismo y la desinformación deliberada como los principales factores contra los que luchan.

Todo esto fue marcado en una comparecencia ante la ONU, para analizar los motivos detrás del actual estancamiento y disminución en las tasas de vacunación a nivel global.

Se estima que existen hoy en día más de 20 millones de niños que no reciben sus vacunas por decisión deliberada e “informada” de sus padres.

(FayerWayer)