Por: Adela Mac Swiney González
Gijón, España.- Con una inspiración en las obras de Francisco de Goya, laescritora española Berna González Harbour presentó en la XXXII edición de la Semana Negra de Gijón, norte español, su novela “El sueño de la razón”, planteando la “negritud” que vive este país ibérico, con capas ocultas, exclusión, y una cada vez mayor desigualdad social.
“El sueño de la razón” es la cuarta entrega de la serie de la Comisaria Ruiz, el personaje principal de esta saga de la también periodista González Harbour, después de “Verano en rojo”, “Margen de error” y “Las lágrimas de Claire Jones”, ésta última planteando el derrumbe de las certezas de la sociedad.
En la Carpa del Encuentro de la Semana Negra de Gijón, una escritora que parece que con sus novelas hace una cartografía de las situaciones que vive España, aseguró que lo “negro” inspirado en las obras de Goya no tiene que ver con un futuro imaginado.
“Estamos en esa negrura, hay un fulgor de que hemos salido de la crisis, hay cifras macroeconómicas que podrían sustentarlo, pero en realidad la desigualdad ha crecido, hay una porción grande de población que vive fuera del sistema de trabajadores, que son pobres y aún hay gente más pobre, debajo de puentes, en subterráneos, en España existe ese mundo y no lo queremos ver”, dijo.
Además, subrayó que en el mundo de las casas ocupadas por ajenos se da un elemento curioso pues a veces no se trata de gente pobre, sino de chico jóvenes que han decidido apartarse del sistema pese a que tuvieran opciones.
“El sistema les ha expulsado ya que alquilar, comprar se ha convertido en algo para ricos, pero hay otros que han encontrado un modus vivendi. Hay una porción de la población que le ha dado la espalda al sistema, porque el sistema, a su vez, se los ha dado”, abundó.
En la nueva novela de González Harbour, su personaje, la comisaria Ruiz vuelve a Madrid para preparar su defensa. El viejo Jefe Superior de la policía ha logrado su suspensión en venganza por una antigua investigación y María está temporalmente fuera del cuerpo. Pero eso no la va a frenar.
Es el mes de mayo, tiempo de fiestas en torno al río Manzanares, y la aparición de unos animales muertos es el primer indicio de una anomalía que pronto dejará más huellas letales: la ejecución de una joven becaria de Historia del Arte en uno de los puentes del río. Y no será la única.
La policía investiga magia negra, acoso sexual o sadismo, pero los distintos sucesos empiezan a conformar una serie de escenificaciones que llevarán a la comisaria Ruiz hasta el legado de Goya.
“Goya supo contar los contrastes de España”, señaló la escritora y explicó que en Madrid, en un momento dado, pintó el colorido, ese Madrid afrancesado, con unas primeras pinturas para tapices coloridas, sensuales, mientras que 35 años después en los mismos escenarios, sus obras son negras, oscuras”, indicó.
“Goya supo representar como nadie este contraste de la España capaz de lo mejor y capaz de lo peor. No sé si yo elegí a Goya o Goya me eligió a mi, pero después de muchas visitas al y de visitar os frescos de San Antonio de la Florida donde está encerrado, sin cráneo, por cierto, supe que Goya supo retratar su tiempo y me inspiré para escribir esta novela”, concluyó.