Mérida, Yucatán.- La disponibilidad de agua potable está en riesgo por diversos factores, entre ellos la instalación de nuevas empresas, sobre todo las del corredor industrial de Hunucmá, que consumen grandes volúmenes y vierten desechos a los mantos freáticos sin tratamiento previo, advirtió el investigador Alán García Lira.
El presidente del Colegio de Ingenieros Químicos de Yucatán planteó la necesidad de que se apliquen políticas que impliquen el uso racional de los recursos, que se respeten los lineamientos del plan hídrico existente y se cuiden las recargas al subsuelo, las cuales deben ser mayores que las extracciones.
El especialista se refirió a la extracción de agua en Hunucmá por parte de complejos fabriles, sobre todo la Cervecería Modelo, que ha implicado escasez de agua en comunidades y colonias cercanas.
Además de la entrada de nuevas empresas que utilizan grandes volúmenes de agua, mencionó que el crecimiento de la población de Mérida y su zona metropolitana conlleva considerable cantidad para atender la demanda.
La disponibilidad de agua se ve afectada también por la contaminación de aceite de cocina, ácido muriático y otros líquidos limpiadores, así como medicamentos, éstos últimos porque son confinados en tiraderos a cielo abierto y cuya descomposición junto con los lixiviados llegan al subsuelo y a los mantos freáticos, alertó.
De acuerdo con un estudio de la Secretaría de Desarrollo Sustentable sobre la Hidrología de Yucatán, con firma autoral de Eduardo Graniel Castro, la permeabilidad del subsuelo hace que el acuífero sea más vulnerable a la contaminación propiciada por la disposición de descargas de aguas residuales y fosas sépticas, aguas pluviales y otros factores como lixiviados de tiraderos de basura municipales y de lagunas de oxidación.
Igual impactan la falta de alcantarillado, fosas sépticas mal construidas o mal diseñadas y fecalismo al aire libre, aunado a la intrusión salina en la franja costera del estado y la presencia de yesos en el subsuelo en algunas áreas del sur.
En la mayor parte de Yucatán las aguas de desecho se descargan al subsuelo por medio de tanques sépticos y pozos someros abandonados, a falta de un sistema de drenaje sanitario.
Otro de los problemas para obtener un registro más confiable del número de aprovechamientos y el volumen de agua que se extrae en el estado es que muchos propietarios de pozos no los registran ante las autoridades y se utilizan para pequeñas industrias, llenado de piscinas o riego de jardines particulares, asienta el estudio.
García Lira invitó en rueda de prensa a académicos y ciudadanos interesados a la conferencia titulada “Respuestas tecnológicas a la problemática de las bolsas de plástico, en torno a su prohibición”, que impartirá Tomás Madera Santana, experto en residuos sólidos, el próximo 15 de agosto a las 17:30 horas en la sede de la Canacintra de Mérida.
(Jesús Mejía)
