Mérida, Yucatán.- El Secretariado Permanente de la Cumbre de los Premios Nobel de la Paz y la organización “Preemtive Love Coalition” anunciaron un programa para extender la enseñanza de la paz en escuelas y universidades del mundo.

Al término de los trabajos de la 17 Cumbre Mundial de los Premios Nobel de la Paz, Liv Torres, directora ejecutiva del Centro Nobel de la Paz, presentó la iniciativa.

Esta asociación permitirá lanzar un plan de estudios para estudiar “una hora de paz, todas las semanas” en las escuelas en todo el mundo.

“Deseamos ampliar los alcances en las escuelas y universidades, y vamos a empezar a desarrollar un plan de estudios”, expuso una de las responsables de la estrategia.

Jeremy Courtney, fundador de Preemtive Love Coalition, explicó que se buscará trabajar con los gobiernos del mundo para enseñar la paz a matemáticos, científicos, contadores, poetas, músicos, atletas y otros profesionistas para que la enseñen conforme se desempeñan.

“Imagínense ustedes un momentito: codificadores que expiden algoritmos para los medios o las redes, con la paz en la mente –como también pensar en utilidades, en rendimientos–, jamás terminaríamos en estos guetos digitales en los cuales nos encontramos, en donde cada quien se destruye aislados, confundidos, en estas cámaras terribles.

“Necesitamos codificadores que sean de paz, que escriban para la paz, no solamente para un buen rendimiento bancario”, ilustró.

Preemtive Love Coalition (Coalición Amor Preventivo), creada hace una década, brinda apoyo, trabajo y educación a nivel internacional.

El expresidente de Colombia, Juan Manuel Santos, reveló que el Secretariado Permanente de la Cumbre produjo un documento que llama “Los 12 valores fundamentales para la educación para la paz”.

Y, a modo de ejemplo, leyó el último, para subrayar su contenido de realidad y de necesidad fundamental.

“La educación para la paz es un deber trascedente que abarca la vida entera”, citó.

Ese principio si lo tomamos en serio en los colegios, en las universidades, en los hogares y nosotros mismos, creo que avanzaríamos muchísimo para tener un mejor futuro y un mundo en paz, resumió el laureado.

Antes, el expresidente de Sudáfrica, Frederik Willem De Klerk, en su participación en la Plenaria “El poder de la Ley vs. La Ley del poder”,

abogó por las minorías religiosas, culturales y étnicas.

“En la mayor parte de los casos, la secesión de las minorías no es una opción porque crearía una amenaza a la integridad territorial de los estados existentes. Asimilación forzada, por supuesto, es inaceptable asimismo.

“Y por lo general se acepta que los estados no deben discriminar en contra de sus ciudadanos debido a sus afiliaciones religiosas, culturales y étnicas”, planteó.

Sin embargo, reconoció que hay menos unanimidad en cuanto al derecho de las minorías culturales de su lengua materna, de la responsabilidad de parte de los estados de brindar ese apoyo, y la educación, el derecho de las comunidades de tener una voz en cuanto a las decisiones las que están afectando y las disposiciones especiales para la inclusión de las minorías en decisiones y en procesos amplios y en las identidades nacionales.

La mayor parte de los países dudan sobre el escrutinio que se está llevando a cabo en cuanto a sus minorías en sus territorios, pero si deseamos promover un mundo sin conflicto necesitamos abordar la causa principal del conflicto en el mundo en la actualidad, ésta es la incapacidad de que aquellas minorías (…) puedan coexistir en sus propios países, expuso.

El Premio Nobel conminó a lograr acuerdos vinculantes sobre los derechos de las minorías como se logró en su momento con los derechos de los individuos.

(LectorMx)