Por Jesús Mejía
Mérida, Yucatán.- Una bióloga, experta en especies animales tropicales, llamó a la población a no satanizar ni perseguir a los murciélagos, toda vez que no se ha comprobado ser causante o tener relación directa con el primer brote de la nueva cepa de coronavirus en China.
Cristina Mac Swiney González, del Centro de Investigaciones Tropicales de la Universidad Veracruzana de Xalapa, planteó que no se debe actuar por presunción o supuestos contra esos quirópteros que tienen una importancia en la cadena alimenticia, además de que son polinizadores.
Recordó que en el pasado, con el mito de Chupacabras, en diversas regiones de México se realizaron matanzas de esos animales nocturnos, por lo que pidió esperar confirmación de las autoridades sanitarias y del equipo que investiga el origen de la enfermedad.
Indicó que son sólo indicios de que el virus tiene que ver con murciélagos o serpientes, y no es primera vez que se establece este tipo de asociación, ya que con anterioridad se le vinculó en África con el ébola y otros males.
“Hay que comprobar la veracidad de las investigaciones en China sobre la cepa del coronavirus, esperar la comprobación si se trata de virus emergente antes de echarle la culpa a los quirópteros”, recalcó en entrevista.
La investigadora yucateca reconoció que algunas especies de murciélagos son consumidas en asado, en sopa o caldo con coco y otros ingredientes en comunidades no sólo de China, sino también en Australia, Nueva Zelanda y África.
Refirió que los murciélagos suelen morder fruta y ésta luego es consumida por humanos; sin embargo, no se ha comprobado una correlación o tránsito de un posible virus de la saliva del animal en el humano.
A principios de este siglo, se detectó en Estados Unidos el llamado “Síndrome de la nariz blanca” que propició la muerte de más de un millón de murciélagos en el noreste de ese país en menos de cuatro años.
De acuerdo con la llamada “Lista Roja” de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) las poblaciones de murciélagos están descendiendo con rapidez en todo el mundo, y varias especies se han extinguido recientemente.
La fuente asienta que de las mil 150 especies existentes en el planeta, 77 figuran como especie casi amenazadas, 99 como vulnerables, 53 en peligro de extinción, 25 en peligro crítico y cinco figuran como ya extintas.
El coronavirus 2019-nCoV o “neumonía de Wuhan” se detectó por primera vez en diciembre anterior en esa ciudad centro-oriental, capital de la provincia de Hubei, que cuenta con unos 11 millones de habitantes.
En principio se le asoció con un mercado de pescados y mariscos.