Mérida, Yucatán.- Pese a los discursos oficiales y campañas de inclusión social, así como la promoción de las lenguas maternas, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) reveló que casi una cuarta parte de la población indígena del país declaró haber experimentado algún tipo de discriminación en los últimos cinco años.

En conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial (21 de marzo), precisó que de la población indígena de 12 y más años, el 24 por ciento expresó haber sido víctima cuando menos una vez de una situación discriminatoria.

Según la Encuesta Nacional sobre Discriminación (ENADIS) 2017 que da a conocer hoy el INEGI, el 75.6 por ciento de los consultados considera que las personas indígenas son poco valoradas por la mayoría de la gente.

El 20.2 por ciento de los 84 millones de personas de 18 y más años que radican en México se ha sentido discriminada por algún motivo en los 12 meses anteriores al levantamiento del muestreo.

Los motivos más frecuentes de percepción de discriminación fueron: la forma de vestir o el arreglo personal con 30 por ciento; la complexión física (peso o estatura) con 29.1 y las creencias religiosas con 28.7.

Si bien es cierto que la discriminación racial puede afectar a cualquier persona, hay grupos o colectivos sociales que lo han sufrido históricamente a lo largo de los años, de manera constante y sistemática, como los pueblos y comunidades indígenas.

La ENADIS 2017 estima una población indígena (de 12 y más años) de 10 millones de personas, de las cuales casi la mitad, el 49.3 por ciento, perciben que sus derechos son poco o nada respetados.

La falta de empleo (20.9 por ciento), la falta de recursos económicos (16.1), la falta de apoyo del gobierno en programas sociales (15.8) y la discriminación por su apariencia o lengua (14.6) son las principales problemáticas que enfrentan.

Casi el 30 por ciento de la población indígena de 12 y más años manifestó al menos un incidente de negación de derechos en los últimos cinco años. Los de mayor ocurrencia fueron de atención médica o entrega de medicamentos y acceso a recibir apoyos de programas sociales.

También una parte de los indígenas ha sido afectada por la negación de atención o servicio en oficinas de gobierno y la oportunidad de trabajar u obtener un ascenso laboral.