Mérida, Yucatán.- Representantes de la asociación civil Gran Parque La Plancha cuestionaron la falta de rigor metodológico y el enfoque “sesgado” del estudio presentado esta semana por la empresa española IDOM Ingeniería que avala la construcción de un tramo subterráneo del Tren Maya hacia el centro de la ciudad de Mérida.

A través de ONU-Hábitat, esa firma presentó un supuesto estudio el pasado martes en la reunión virtual convocada por el Instituto Municipal de Planeación (IMPLAN) de Mérida, que respalda el trazo a desnivel de unos seis kilómetros y la eventual construcción de una estación en la zona de La Plancha.

El arquitecto David Sosa Solís, miembro del Colectivo 4 de Julio y de la mencionada AC, informó haber participado en la reunión, y afirmó que el planteamiento fue sesgado, a la medida, para ajustarse a los requerimientos impuestos por los promoventes del Tren Maya, entre ellos el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur).

Restó seriedad al proyecto de la sección subterránea que sostiene la empresa consultora IDOM Ingeniería, ya que carece de rigor metodológico y de sustentación.

Recordó que esa empresa fue la misma que presentó un estudio en 2009 al entonces gobierno de Ivonne Ortega Pacheco, quien promovió la idea de un tren transpeninsular o “tren bala”.

Sosa Solís expuso que IDOM recibió en esa época un contrato para realizar los estudios de factibilidad por más de 500 millones de pesos; sin embargo, añadió, nunca presentó información de manera pública, al menos no se difundió.

Ahora IDOM regresa a hablar del mismo tema, dijo el profesionista, quien restó credibilidad a cualquier estudio que provenga de esa empresa por sus antecedentes y la falta de rigor metodológico.

En la reunión el pasado martes, agregó, el representante de IDOM reforzó la idea de construir una estación en la zona de La Plancha como única opción sin tomar en cuenta alternativa alguna, polígonos disponibles y otros sitios susceptibles de construcción.

El activista opinó que fue ingenuo e incluso ridículo cuando el promovente estableció una comparación de La Plancha con otras 17 estaciones del mundo, que conectan con una red ferroviaria de muchísima mayor importancia como es la europea, que todos los días moviliza a nueve millones de pasajeros.

“Es una desproporción hacer esa comparación, ya que sólo aborda aspectos que combinen al proyecto sin tomar en cuenta la realidad local del Estado de Yucatán”, puntualizó Sosa Solís, uno de los defensores de convertir La Plancha en un parque ecológico y centro cultural.

Remarcó que la firma española tiene el concepto erróneo de que La Plancha es actualmente una estación, lo cual no es así, pues alberga a la Escuela Superior de Artes de Yucatán (ESAY).

“Lo que queda de la superficie es un patio de maniobras donde hay un taller con una operación mínima, pero no es una estación sino un baldío urbano”, aclaró.

Por todo lo anterior, propuso a las autoridades de Fonatur y a consultoras en ingeniería entablar un diálogo abierto, transparente, para analizar alternativas de desarrollo para el predio de La Plancha.

Por su parte, el presidente de la asociación civil, Félix Rubio Villanueva, pidió tomar en cuenta la propuesta de los residentes, investigadores y académicos de convertir las 26 hectáreas en un parque arbolado, que sea un verdadero pulmón para Mérida.

(LectorMx)