Mérida, Yucatán.- Las recientes inundaciones en Mérida se pueden repetir e, incluso, rebasarlas en lo que resta de la presente temporada de lluvias y huracanes.

Es la previsión del ingeniero Jorge López González, especialista en Hidrología e Hidráulica de la Universidad Marista, sobre la situación inédita en la capital yucateca a partir lo que llamó la trilogía, en alusión a las tormentas tropicales “Cristóbal”, principios de junio, y “Gamma”, primeros días de octubre, así como el huracán “Delta”, los días 7 y 8 del mes en curso.

“¿Qué va a pasar? Lo único que tenemos que hacer como seres humanos y como ingenieros es adaptarnos a las nuevas circunstancias, se trata de revisar los reglamentos y de aquí en adelante ya tenemos este punto de partida”, explicó en conferencia de prensa que encabezó el alcalde Renán Barrera Concha.

En esa reunión con medios de comunicación, el edil panista informó sobre la atención y respuesta a zonas afectadas por lluvias que dejó “Delta”.

López González, profesor de la materia, advirtió que ahora los diseños de construcción tendrán que adaptarse y tomar en cuenta también factores de seguridad.

“Porque lo que acaba de ocurrir puede ser superado… Ahora sí ya estamos en esta conciencia, puede ser superado porque si se presentó esta trilogía, la temporada de huracanes aún no termina, termina el 30 de noviembre.

No ha terminado la temporada de huracanes y nos puede llover más. No hay que pensar de manera cataclísmica, pero puede suceder”, alertó.

Para enfrentar las nuevas condiciones, propuso no un cambio de reglamentos estatales, municipales y federales, sino un ajuste a partir de una revisión de todos.

Apoyado en gráficas, resumió que una enorme cantidad de agua en la península de Yucatán aún está buscando la manera de cómo salir, y los mayores volúmenes se concentraron en Mérida, según demostraron los cenotes rebosados.

“Es lo más visual para que se pueda entender la problemática, que no es una cosa que digamos lo vamos a resolver nosotros, sino que tenemos que adaptarnos a ello”, precisó.

“¿Qué es lo que viene?”, preguntó para adelantar que los diseños de pozos pluviales tendrán que modificarse, y estimó que éstos funcionaron “hasta hace semana y media” (antes de Delta), por lo que ahora tendrán que tomar en cuenta “esto que nunca antes se había presentado”.

“Si alguien piensa en este momento: bueno, ¿Pero no pudo ser capaz alguien de preverlo?, pues no, porque desde el punto de vista de ingeniería se diseña con base en lo que ya ocurrió, y el máximo de máximos era el huracán Isidoro que pasó hace 18 años”, refirió López González.

“Quién pudo prever esto, pues prácticamente nadie lo podría prever, ahora ya sabemos que esto puede ocurrir nuevamente, y tenemos que pensar en algo que se ha estado hablando mucho de 10 años para acá, y se llama cambio climático”, abundó.

Los trastornos del clima son evidentes en la península de Yucatán –afirmó–, como se ha podido observar en el avance del mar encima de las playas en puertos al norte de Mérida.

“Y les recuerdo que no hay nada imposible para la ingeniería, la ingeniería es capaz de resolver esto, y otra cosa: siempre y cuando no estemos peleando en contra de la naturaleza, más que nada adaptarnos a la naturaleza”, concluyó.

Por su parte, Barrera Concha indicó que hay un avance positivo en la atención de las inundaciones en colonias y comisarías, sin que se haya resuelto por completo.

Las lluvias del fin de semana, que no estuvieron generalizadas ni intensas, permitieron seguir avanzando rápidamente en los trabajos de desagüe, fumigación y operativos de salud y ayuda humanitaria, principalmente en las comisarías, asentó.

En cuanto al operativo en el fraccionamiento Las Américas, reveló que se han retirado un total de 67 millones 880 mil litros de agua, con 48 pipas proporcionadas por la desarrolladora Sadasi, la Junta de Agua Potable y Alcantarillado (Japay) y el municipio de Mérida.

(LectorMx)