Mérida, Yucatán.- Tan cíclico como un reloj de agujas, el debate sobre el cambio de horario en México “da la vuelta” cada año, y conforme se acerca la fecha, regresa -algunas veces- con mucha fuerza, con la misma duda que seguirá flotando en el aire: ¿funciona?
Pero mientras el debate avanza, las horas también y pronto ambos “desaparecerán” con el pasar de los días posteriores al cambio, que ocurrirá la madrugada del domingo 25 de octubre, a las 2:00 horas (2 de la madrugada).
Esta modificación, en la que la mayoría de los mexicanos tendremos que atrasar una hora nuestros relojes, no aplica para los estados de la frontera norte (que colindan con Estados Unidos), cuyas fechas de cambio son diferentes, ni para Sonora y Quintana Roo, que conservan un mismo uso horario durante todo el año.
De acuerdo con el Centro Nacional de Metrología (Cenam), en México hay 4 husos horarios diferentes: Noreste, Pacífico, Centro y Sureste; 26 entidades se rigen por el del “Centro”, incluido Yucatán, aunque en realidad esté en el “Sureste”; en este último sólo está Quintana Roo.
Cada año, durante el horario de verano, es decir, el lapso que va del primer domingo de abril al último de octubre, en México sólo rigen tres husos horarios, pues “Sureste” y “Centro” se “igualan”. “Noreste” y “Pacífico” aplican el cambio pero con fechas y husos diferentes.
Para el cambio que se avecina, es decir, la entrada al horario de invierno, la recomendación general es que, si bien la “nueva hora” inicia en la madrugada del domingo 25 de octubre, el sábado 24 por la noche, antes de ir a dormir, se atrase el reloj una hora; o, en todo caso, se verifique que nuestros dispositivos electrónicos tengan activa la opción de cambiar automáticamente.
En 2020 se cumplieron 25 años de la aplicación del horario de verano en la mayor parte del país; en años recientes, Quintana Roo decidió “salirse” de esta modificación y, como ya comentamos, permanecer con el mismo huso horario durante todo el año.
Continuamente se escucha -incluso de la voz del presidente Andrés Manuel López Obrador- que esto puede cambiar, pero hasta ahora no hay nada en concreto. Así, en la paradoja, mientras el debate se vuelve interminable, el cambio va y viene año con año y, al menos en 2020, no será la excepción.