Ciudad de México.- Los tramos 6 y 7 del Tren Maya, los dos últimos del futuro circuito, están proyectados para construcción en año y ocho meses.

Tras el banderazo oficial ayer desde el sur de Quintana Roo, los trabajos que abarcarán alrededor de 541 kilómetros están a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

“Fuimos a la instalación de los campamentos de los ingenieros militares; 17 en todo el tramo de Escárcega hasta Cancún…”, explicó el presidente Andrés Manuel López Obrador.

“Tienen la tarea de construir 550 kilómetros de vías férreas y el Aeropuerto Internacional de Tulum, y tienen que terminar estas obras en diciembre del año próximo”, emplazó en la conferencia mañanera.

El Tramo 6, de Tulum a Bacalar, con 254 kilómetros, y el Tramo 7, de Bacalar a Escárcega, con 287 kilómetros.

“Entonces fuimos y voy a estar visitando cada mes toda la ruta del Tren Maya para que no se nos demore, porque falta poco tiempo, claro dependiendo de lo del domingo, de lo que va pasar el domingo y dependiendo de otras razones…”, abundó el tabasqueño.

Luego retomó sus cuestionamientos en contra de quienes protestan por la construcción en el Tramo 5, de Cancún a Tulum, en donde se abre una brecha de 50 metros, como derecho de vía, a lo largo de 100 hectáreas.

“Nunca los ambientalistas habían protestado, porque así como hay ambientalistas de verdad, serios, responsables, hay pseudoambientalistas. Más que nada vividores que están al servicio de grupos de intereses creados; incluso hay organizaciones de ambientalistas que están financiadas por el Gobierno de Estados Unidos”, acusó.

En Palacio Nacional, López Obrador repitió que “es casualidad”, pero justo cuando se toman decisiones en contra de la empresa Calica –filial de “Legacy Vulcan”, de Estados Unidos– se desató una “avalancha” de ataques.

“Y es contra el Tren Maya, no contra la empresa”, puntualizó.

La extracción de materiales pétreos en el mega banco de Calica en Playa del Carmen quedó suspendida desde finales de marzo de este año debido a que, según el Gobierno de México, esas operaciones dañan a la naturaleza en Quintana Roo.

(LectorMx)