Playa del Carmen, Quintana Roo.- El desafío que implica la lucha contra el sargazo en el caribe mexicano y la urgencia de las acciones para reducir sus impactos fue remarcado hoy por la Dra. Brigitta van Tussenbroek, experta del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

La investigadora titular de la Unidad Académica: Sistemas Arrecifales Puerto Morelos, mostró con gráficas y datos el comportamiento del fenómeno y cómo el centro y norte de Quintana Roo reciben más recale.

“También otros modelos han descubierto que la mayor parte que entra al caribe mexicano pasa por el este del banco Chinchorro”, reveló.

“Entonces, si ya… por encima de Chinchorro, todo lo que está en el mar ya mejor déjalo ahí porque eso se va. Entonces no va a llegar a nuestra costa”, precisó en el “Primer Foro Sargazo, una oportunidad para innovar”.

En su conferencia magistral: “El sargazo, su origen y dinámica como ecosistema”, no proporcionó pronósticos para el próximo año o los siguientes, aunque describió la magnitud del problema.

Al exponer las aportaciones de los “modelajes” ya disponibles, refirió que los nortes frenan el avance de las manchas hacia el litoral de Quintana Roo, mientras que los vientos alisios los empujan a la costa.

“También creo que este modelo se debe de afinar, más bien concentrar en la zona donde está entrando el sargazo, no todo el caribe, porque como digo, lo que ya está al este de Cozumel, ya mejor ni considerarlo… eso básicamente lo puedes ignorar”, detalló.

La especialista en pastos marinos habló luego de la cantidad y de los actores más eficientes en los registros de recolección de la macroalga.

“Los hoteles son los más eficientes en dar los datos, porque ellos todos los días tienen que contabilizar los camiones que movieron: cada camión tiene tantos metros, etcétera, etcétera y sabemos cuánta playa tiene cada hotel: 200 metros, un kilómetro, dos, etcétera.

“Entonces es fácil de determinar cuánto entonces está llegando”, apuntó en el campus Playa del Carmen de la Universidad Autónoma del Estado de Quintana Roo (Uqroo).

Brigitta van Tussenbroek definió que “hay un reto enorme” en los más 900 kilómetros de costa quintanarroense.

En la temporada 2022, que finalizó en septiembre, la Secretaría de Marina Armada de México (SEMAR) difundió que fueron retiradas 50 mil 619 toneladas en playas y áreas marítimas de Quintana Roo.

Durante los años pico, 2018-2019, los hoteles reportaron más de dos mil metros cúbicos por kilómetro, en promedio anuales.

“Entonces, lidiar con tanto sargazo que llega por cada kilómetro de la playa y además, a lo largo de 800 (900) kilómetros, es un reto fundamental…

“Y este es el mensaje final: entonces, sí es un reto enorme, pero no tenemos tiempo”, asentó.

Entre los detonantes de la proliferación del sargazo, mencionó la temperatura/cambio climático y nutrientes provenientes de ríos y polvo de Sahara.

(LectorMx)