Mérida, Yucatán.- El nublado dominante en el cielo impidió apreciar en su esplendor la entrada de los rayos del Sol en el pórtico oriente del edificio de las Siete Muñecas en la zona arqueológica de Dzibilchaltún.

Los efectos del frente frío número 41 jugaron en contra de las personas que asistieron para observar el fenómeno arqueoastronómico y recargarse de energía a la entrada de la primavera.

“Yo creo que muchos vieron el cielo, vieron la lluviecita y dijeron mejor no nos movemos, pero sí hubo bastantes animados…”, expresó la arqueóloga Federica Sodi Miranda, directora del sitio prehispánico.

Unas 200 personas, entre jóvenes, adultos mayores y niños, llegaron desde la apertura del parador turístico y permanecieron a pesar de las condiciones inapropiadas del tiempo.

Por escasos dos minutos, el astro rey asomó levemente para la concurrencia.

“Mañana esperemos que se vea de acuerdo al clima…”, explicó Sodi Miranda.

El paso del Sol en el Templo de las Siete Muñecas reúne a centenares y hasta miles de visitantes en los amaneceres de los equinoccios de otoño y de la primavera.

El disco celeste queda al centro de la puerta creando un fenómeno de luz y sombra en una de las fachadas del principal monumento.

Este año el equinoccio se registrará el 20 de marzo, a las 21:24 horas del tiempo universal coordinado (equivalente a las 15:24 horas del centro de México).

Este lunes Dzibilchaltún abrió su reja para el ingreso de automóviles a las 4:30 de la mañana, y a partir de las 5:00 horas se permitió el acceso hasta el Templo de las Siete Muñecas; el resto del antiguo asentamiento maya podrá recorrerse a partir de las 8:00 horas.

El Museo de Sitio y el cenote permanecerán cerrados ambos días (20 y 21).

(LectorMx)