Progreso, Yucatán.- Un solitario pescador que estaba atado a los restos de su embarcación volcada fue hallado este jueves en alta mar enfrente de las costas del oriente de Yucatán.

La nave menor pantoqueada (volteada) tiene las características del “Peyucsa 12”, desaparecida desde el lunes por la noche durante el paso del huracán “Milton”.

El único sobreviviente encontrado estaba sobre el casco. Se desconoce qué sucedió con sus dos compañeros.

En el “Peyucsa 12” –hasta donde se conoce– viajaban José Ulloa, el patrón; Lázaro Esquivel Castellano y Marcos García.

La Secretaría de Marina (Semar) informó que una aeronave tipo Persuader de la Armada de México avistó al náufrago (de nombre desconocido por ahora).

El hallazgo ocurrió alrededor de las 10:00 horas de hoy, a unas 116 millas náuticas (214 kilómetros) al noreste de Progreso y a 60 millas náuticas (111 kilómetros) al norte de Río Lagartos, Yucatán.

Por lo anterior, una embarcación tipo Defender de la Estación Naval de Búsqueda, Rescate y Vigilancia Marítima de Yucalpetén se dirigió a la ubicación antes señalada para salvaguardar la vida del tripulante avistado.

“Al contar con mayor información se les compartirá oportunamente”, precisó la Décima Tercera Zona Naval de Yucalpetén.

Con este sumarían nueve los rescatados al momento: cuatro del “Neldy”, cuatro del “Peyucsa 13” que también regresaron anoche a Progreso y el de este día.

Permanecen sin localización seis pescadores: dos restantes del “Peyucsa 12” y cuatro del “Halcón 1”.

En este último barco están: José Luis Junco Hernández, patrón; Aristeo Abrehuo Ulloa, Javier Francisco Hernández López y Jesús Manuel García Brito.

“MURIÓ DESHIDRATADO”
Por la noche, un familiar de Lázaro Esquivel Castellano dio a conocer que cuando llegó el auxilio de la Armada de México este ya había fallecido, al parecer de deshidratación.

Santos, el hermano que voló en la aeronave al momento de la localización, se quejó que la tardanza en el rescate.

“Cinco horas estuvimos volando sobre mi hermano desde las 10 de la mañana que lo encontramos hasta las 3 de la tarde cuando vimos que se desvaneció porque tenía sed.

“Mi hermano se durmió, el piloto pedía ayuda, pero nadie le contestaba…”, explicó con lágrimas.

Con sus últimas fuerzas, Lázaro se arrojaba agua salina encima como evidencia de la deshidratación.

La ayuda urgente se demoró demasiado, hasta que cayó al mar.

Sin embargo, no se cuenta con versión oficial sobre lo sucedido.

(LectorMx)