Mérida, Yucatán.- Las seis horas más obscuras para los gigantes de las redes: Facebook, WhastsApp e Instagram se vivieron este lunes, con una caída prolongada de las 10:22 a 17:15 horas aproximadamente en el primer caso.

El restablecimiento paulatino y parcial se observó con la entrada y salida de mensajes que permanecieron en el limbo cibernético.

Sin embargo, las intermitencias persistían hasta las 18:00 horas.

Instagram regresó casi de manera simultánea con Facebook, pero WhatsApp permaneció todavía más tiempo sin servicio.

Para un sinnúmero de empresas de todos los tamaños en el mundo y millones de usuarios, el colapso de las principales plataformas de redes sociales no tiene precedentes.

Expertos consultados –quienes pidieron omitir sus nombres y firmas en las que se desempeñan–, consideraron que el suceso implicará cuantiosas pérdidas económicas y, a nivel social, las repercusiones son, incluso, psicológicas, con estados de angustia y ansiedad.

A partir de un análisis preliminar, el sector de la industria de telecomunicaciones y electrónica de Yucatán planteó que nunca estas interrupciones fueron tan prolongadas como este 4 de octubre.

Miles de transacciones comerciales y contactos de negocios a distancia se suspendieron.

Facebook, WhatsApp e Instagram, propiedad del magnate Mark Zuckerber, se desplomaron en totalidad promedio a las 10:30 horas del centro de México.

Por lo pronto, el precio de las acciones de Facebook bajó 4.89 por ciento a 326.73 dólares cada una en el índice de NASDAQ, lo que significó una pérdida en valor de mercado de más de 6 mil millones de dólares, según un reporte parcial.

“Cuando pensábamos que la economía global estaba encaminada a las formas digitales con el riesgo de muchas empresas de desaparecer de no seguir esta tendencia, ocurren estas fallas tecnológicas, lo que obligará a las empresas a diseñar medidas preventivas ante este tipo de eventualidades”, comentó una especialista.

El trastorno se extendió a las redes de socialización, ya que muchas personas que utilizan estos medios para intercambiar mensajes y vincularse quedaron virtualmente aisladas por más de seis horas, con excepción de aquellas que disponen de cuentas en Twitter, de las llamadas telefónicas directas y de los correos electrónicos.

Como resultado de la pandemia, transitamos de un modelo de comunidad a uno de interacción a distancia, mediante las reuniones virtuales en zoom, como parte de un proceso de adaptación a la nueva realidad, por eso el impacto también es severo en lo social, abundó la declarante.

Lo ocurrido este día implica meditar sobre la alta dependencia hacia las plataformas digitales, la necesidad de establecer medidas preventivas e iniciar un proceso de adaptación a este tipo de trastornos tecnológicos, concluyó la entrevistada.

(LectorMx)