Mérida, Yucatán.- El futuro del Gran Parque “La Plancha”, en terrenos de la antigua estación de ferrocarriles, será definido por el presidente Andrés Manuel López Obrador en su visita a Yucatán este sábado.

El gobernador Mauricio Vila Dosal presentará al mandatario dos propuestas: una mixta, que combinaría un área verde y pública con instalaciones militares, y otra que dejaría la totalidad de ese espacio como parque comunitario.

“Este es un proyecto que es trascendental para nosotros las y los yucatecos y les vamos a mantener informados de los resultados que obtengamos”, precisó.

De prosperar el segundo plan, el Gobierno del Estado donaría otro predio para la construcción de las instalaciones militares en ubicación desconocida por ahora.

“El deseo” expreso de López Obrador –comentó el gobernador– era entregar el polígono de “La Plancha” a las Fuerzas Armadas para un cuartel de la Guardia Nacional (GN), viviendas y “otras necesidades” que ellos tienen.

“Yo le pedí al presidente de la República que me permitiera platicar con el secretario de la Defensa (Luis Cresencio Sandoval González) y que pudiéramos ponernos de acuerdo en cual podría ser el mejor uso para ese terreno”, reveló Vila Dosal.

En principio, el planteamiento de Yucatán al Ejecutivo federal proponía utilizar el 70 por ciento del terreno y convertirlo en parque, con financiamiento que provendría de la comercialización del 30 por ciento de las 22 hectáreas.

“Al haber el cambio en Fonatur hace un mes, que estuvo el presidente de la República, me decía que quería cambiar lo que estábamos haciendo allá en La Plancha…”, abundó.

El mandatario refirió la “excelente relación de trabajo y coordinación” que mantiene con el presidente de la República en lo general y en lo relativo al Tren Maya.

El anuncio ocurrió durante la toma de compromiso del Consejo Directivo 2022-2023 de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Mérida, donde Beatriz Gómory Correa asumió la presidencia en sustitución de Fernando Ponce Díaz.

En su discurso, Vila Dosal retomó una vieja demanda de la iniciativa privada local: una reducción en el costo del consumo eléctrico.

Indicó que la próxima semana recibirá a altos directivos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y de la Secretaría de Energía (Sener) para hablar de la ampliación del ducto de Mayakan anunciada desde finales del año pasado.

Según los planes, esa obra permitiría pasar de 250 millones de pies cúbicos diarios a 400 millones de pies cúbicos diarios, lo que podría ayudar a concretar tarifas eléctricas más bajas.

En otro punto, el mandatario señaló que ha instruido a funcionarios del Instituto de Seguridad Social de los Trabajadores del Estado (ISSTEY) y de la Secretaría de Administración y Finanzas a que conformen “un grupo de expertos”, los mejores a nivel nacional y estatal, para determinar la ruta a seguir en el tema de las jubilaciones y pensiones de la burocracia en la entidad.

Ratificó que la situación del ISSTEY pone “en serios problemas” a las finanzas de Yucatán y que en 2027 se convertirán insostenibles.

“Hay dos opciones: pateamos la lata como lo hicieron los gobiernos anteriores y ponemos en riesgo las pensiones de las y los trabajadores y las finanzas estatales, o tomamos las acciones que responsablemente debemos de tomar entre todos”, apuntó.

A su vez, el presidente nacional de Coparmex, José Medina Mora Icaza, afirmó que, ante los grandes desafíos a los que nos enfrentamos, Yucatán y México necesitan que “cada quien ponga su granito arena para construir el país que queremos, uno más justo, democrático y en paz”.

(LectorMx)