Nunca se miente tanto como antes de las elecciones,
durante la guerra y después de la cacería
Otto von Bismark
Julian Santiesteban
A tres años de entrado en vigor el huso horario Caribe, resulta ocioso discutir sobre sus beneficios y perjuicios, pues es evidente que el sector empresarial turístico –impulsor de la medida- está conforme con sus resultados, aunque tenga impacto negativo en la población de consumo doméstico; por ello es que no haber modificado la medida de origen “borgista” representó una enorme pérdida de oportunidad política que será aprovechada sin duda en el proceso electoral 2019.
Al inicio de su mandato, el gobernador Carlos Joaquín González se comprometió a “revisar” la vigencia del huso horario que impulsó su antecesor, con el apoyo de hoteleros de la zona norte y llevada la iniciativa al Congreso federal por parte de los entonces diputados del Partido Revolucionario Institucional (PRI), pues la polémica sobre sus beneficios ha permanecido más allá de la vigencia, y aunque resulta evidente que perjuicio no hay para los “señores del dinero” –si así fuera ya hubiera sido modificada-, tampoco hubo homologación de horarios con los estados del este de Estados Unidos, principal argumento para impulsar la medida en cuestión.
Y es que del PAN y el PRD se esperaba una reversión a dicho horario, pues fue compromiso de campaña en 2016 para llegar al poder, por ello en noviembre de 2017 los diputados del PRD José Esquivel Vargas, Laura Beristain Navarrete, Emiliano Ramos Hernández; del PAN, Fernando Zelaya Espinosa, Eduardo Martínez Arcila, Mayuli Martínez Simón, Eugenia Solís Salazar,Gabriela Angulo Sauri y Jesús Zetina Tejero; de Nueva Alianza Ramón Padilla Balam, y de Encuentro Social, Carlos Mario Villanueva Tenorio, presentaron un punto de acuerdo para exhortar al Congreso federal para que modificara el horario; pero el mandatario reviró afirmando que la medida era “populista” y, aunque no se opuso, dijo que debiera consultarse con la población sobre el apoyo a la misma. Desde entonces, todo quedó frenado desde el gobierno y el Legislativo local.
Si se hubiera consultado como propuso el mandatario, se hubiera identificado el rechazo al actual horario, tanto, que el tema ha revivido y apunta a colocarse en la agenda pública y electoral, pues los diputados de Morena han anunciado que impulsarán desde este mes de noviembre la reversión esperada y el hecho no puede considerarse menor, tomando en cuenta que ese partido ya gobierna a más del ochenta por ciento de la población quintanarroense, sobre todo los municipios Benito Juárez y Solidaridad –este último gobernado por Laura Beristain, que apoyó inicialmente la medida.-
El PAN y PRD, parece, ya no impulsarán el tema, están perdiendo la oportunidad política, y habrá que ver si las alcaldesas de Morena, Mara Lezama Espinoza y Laura Beristain Navarrete apoyan a sus diputados federales en contra de los deseos de los “señores del dinero”, porque la reversión, independientemente de los beneficios políticos con rumbo a las elecciones intermedias, requerirán del apoyo político para reunir apoyo social, la semana que inicia es clave para que manifiesten su postura. ¿habrá quien aproveche la oportunidad? ¿perderán por primera vez los “señores del dinero”? sólo falta esperar la declaración abierta.
COMENTARIO MORBOSO
A propósito de elecciones y decisiones, el proceso interno del Partido Acción Nacional (PAN) ha entrado en su etapa final y con ello se ha dibujado también la visión de los dos aspirantes que pretenden dirigirlo a nivel nacional Manuel Gómez Morín Martínez del Río y Marko Cortés Mendoza, específicamente en lo relativo a las alianzas con otros partidos para competir en los procesos electorales, por lo pronto, en las seis entidades en que habrá comicios en 2016, entre ellas Quintana Roo, que renovará su Congreso.
Goméz Morín, quien la semana anterior estuvo de gira por Quintana Roo, se declaró abiertamente en contra de volver a coaligarse con el Partido de la Revolución Democrática (PRD), pues señaló que en esa unión el blanquiazul ha sido solamente utilizado, pero además destacó el antagonismo ideológico de ambos institutos, por lo que recalcó que esas uniones son “contra natura.”
Un poco más mesurado, Cortés Mendoza se ha manifestado en favor de las alianzas, pero recalcó que las que se establezcan, de ganar la presidencia del partido, deberán ser avaladas por la militancia en pleno y no ser impulsadas solamente por la cúpula partidista. Gómez Morín es nieto de uno de los fundadores de Acción Nacional y le apoya el ala más ortodoxa de ese instituto, mientras el apoyo del michoacano Cortés Mendoza proviene fundamentalmente de los gobernadores blanquiazules y los “hombres del poder” albiazul; en cualquiera de los casos, se observa reticencia de ambos para volver a contender coaligados con el Sol Azteca, mismo que, por cierto, está en proceso de desaparición.
Desde 1991, el PRD y el PAN han contendido juntos por gubernaturas en 20 ocasiones, de las cuales ganaron en 11; y el porcentaje de efectividad oscila entre el 25 y el 71 por ciento, desde el inicio hasta los años recientes, según un interesante reportaje publicado en septiembre de 2017 por el portal La Silla Rota, pero el desplome de esa unión llegó en 2018, con el arrasador triunfo de Andrés Manuel López Obrador con Morena; lo que colocó a partidos como el PRD al borde de la desaparición y al PAN con las fracciones parlamentarias federales más reducidas de los últimos veinte años. Así, la separación parece inminente, como ya ocurrió entre el PRI y el Partido Verde Ecologista (PVE), pues este último ya optó por la “conveniente” unión a Morena, así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra. Nos leemos en la próxima.
