Por Adela Mac Swiney González

Gijón, España.- Con la perspectiva de que la amenaza de un atentado yihadista en España sigue estando muy vigente, la escritora catalana Anna Teixidor presentó hoy en la XXXIII edición de la Semana Negra de Gijón, norte de España, “Los silencios del 17-A”, una investigación sobre todo lo que estuvo presente y detrás de los atentados que tuvieron lugar en Cataluña el 17 de agosto de 2017.

El libro salió publicado en español hace apenas un mes, pero ya se había presentado en catalán, tras más de un centenar de entrevistas de trabajo de campo, con información acerca de los autores materiales, un retrato de estos jovenes que presentaron una evolución hacia el extremismo yihadista y también la constancia de que hubo descoordinación de los cuerpos policiales.

“Es altamente probable que en España podamos vivir otro atentado yihadista” como los del 17 de agosto de 2017, una serie de ataques terroristas en Barcelona y la localidad de Cambrils. En la capital catalana se registraron 15 muertos y 131 heridos, mientras que en el segundo punto fueron abatidos los cinco presuntos terroristas, además de seis personas heridas por atropello y una mujer muerta por apuñalamiento, señaló Teixidor.

“Es una amenaza muy presente, un atentado es probable, ahora mismo las autoridades españolas que trabajan con acciones antiterroristas no quieren bajar las alertas ante esta amenaza. Es cierto que hay un debilitamiento de seguidores de Estado Islámico, quedó desmembrado pero los seguidores existen, hay un califato sentimental”, añadió.

La autora señaló que la célula, que tenía su base de operaciones en la localidad catalana de Ripoll, en Girona, de apenas diez mil habitantes, tenía planeado atacar la Sagrada Familia, el Camp Nou y la Torre Eiffel, en París.

“Es un tema que sigue lleno de incertidumbres, de dudas, pero además hay núcleos de personas que simpatizan con esta causa y que sí están dispuestos a participar en una labor logística, pese al desmembramiento del Estado Islámico, por lo que es una amenaza muy actual, muy vigente en España y en otros lugares de Europa”, insistió.

El juicio contra otros terroristas que sí fueron detenidos tendrá lugar a principios del año que viene, aunque Teixidor afirmó que no espera que se produzcan novedades del caso. “Se va a llegar al juicio sin haber descubierto las relaciones internacionales del grupo, cuya cabeza podría estar en Bélgica”, acotó.

Sobre los fallos en la coordinación de los distintos grupos policiales que investigaban la existencia de grupos islámicos radicalizados antes de que se produjeran los atentados, explicó que si ya en otras comunidades autónomas de España a veces hay rivalidad o falta de comunicación entre la Policía Nacional y la Guardia Civil, en Cataluña que existe otro grupo, los Mossos de Esquadra, esto pudo ser más viable.

Puso como ejemplo que algunos cuerpos de seguridad llevaron a cabo detenciones de personas sin saber que eran confidentes de otra fuerza, pero lo que es real es que ya en 2014 se sabía de un grupo de jóvenes que intercambiaban mensajes yihadistas a través de redes sociales y estaban organizándose.

La periodista indicó que la persona que actuó como adoctrinador y reclutador llegó a Ripoll después de haber intentado ser nombrado imán en otras ciudades catalanas, pero no lo consiguió porque las comunidades musulmanas se lo impidieron porque sabían que tenía antecedentes penales, pero la falta de una buena relación de comunicación de las fuerzas policiales con la población musulmana de la localidad favoreció su nombramiento como imán allí.