La compañía comprobará el listado de contraseñas más empleadas con la propuesta por el usuario, y si coinciden, impedirá su uso‘12345’, ‘qwerty’, ‘password’…

Aunque cueste creerlo, el ingenio de los usuarios a la hora de determinar una contraseña es absolutamente nulo y cada año se repite el listado de contraseñas más utilizadas sin sufrir apenas variaciones. Es el paraíso de los hackers, que apenas tienen que esforzarse para acceder a cuentas ajenas. El incidente sufrido por LinkedIn, en el que millones de datos de usuarios de su sistema fueron robados, quedando toda su información al descubierto, ha sido la gota que ha colmado el vaso. Microsoft ha decidido cortar por lo sano con este problema y va a prohibir el uso de contraseñas tontas en todos sus servicios.

“Lo más importante a la hora de escoger una contraseña es que sea única y, en consecuencia, difícil de averiguar”, explica Microsoft en su blog corporativo. Básicamente, lo que hará el gigante es cotejar el listado dinámico de contraseñas más empleadas con la propuesta por el usuario, y si coinciden, se impedirá su uso. Con esta simple medida la firma se asegura que el ataque a este tipo de usuarios resulte más complicado, o al menos, no tan sencillo.

Además, la compañía ha creado una guía básica para ayudar a los usuarios a proteger correctamente sus cuentas (aplicable, lógicamente, a cualquier otro servicio). Entre los consejos principales están escoger una contraseña de al menos 8 caracteres, emplear alguna mayúscula y símbolo, y sobre todo, activar la verificación en dos pasos. Se trata en definitiva de dificultar al máximo la acción de los hackers, pero no cabe duda que a costa de perder comodidad y acceder a una cuenta. En este sentido, los usuarios que tengan activada la verificación en dos pasos conocen bien lo tedioso que resulta configurar un nuevo dispositivo por primera vez.

El problema es que muchos internautas no pueden (o quieren) acordarse de una contraseña única por servicio que, además, combina símbolos y mayúsculas. Hasta que los sistemas biométricos se impongan, donde brillan los gestores de contraseñas, unos servicios que equilibran de la mejor manera la seguridad y la conveniencia, y hacen que el problema de la seguridad en las cuentas sea mucho más llevadero.

(Vanguardia)