Mérida, Yucatán. – En caso de que un autobús de pasajeros sea asaltado en carretera, los operadores aplican un protocolo de seguridad mediante el cual se busca proteger a los usuarios sin que ello signifique que esté en contubernio con los delincuentes, sostuvo un representante del sector.
El secretario general de la Asociación Mexicana de Organizaciones de Transportistas (Amotac), Andrés Poot Alonzo, rechazó señalamientos de que el chofer en colusión con los asaltantes permite que los pasajeros sean despojados de sus pertenencias y se cometan otros ilícitos.
Informó que la Comisión Consultiva del Transporte del Estado de Yucatán se reúne periódicamente para analizar las situaciones de riesgo y los operadores, en ese sentido, han sido capacitados para saber actuar o responder en caso de un asalto.
Indicó que en Yucatán este ilícito casi inexistente, sin embargo, recordó que apenas el pasado dos de julio dos hombres armados asaltaron al chofer y a los 46 pasajeros de un camión que cubría la ruta Cancún-Mérida, hecho que ocurrieron en la base de Leona Vicario, Quintana Roo.
De igual manera, mencionó que pasajeros de una unidad de Autobuses de Oriente (ADO) que viajaban de Mérida a Villahermosa en marzo pasado, fueron despojados de sus pertenencias en la madrugada, en el tramo de la autopista Champotón- Campeche por un grupo armado que los asaltó, tras colocar troncos en el camino.
“Se busca no arriesgar la integridad física de alguno de los pasajeros, de cuya seguridad es responsable el operador de la unidad”, puntualizó el representante de la Amotac en Yucatán, al que se encuentran adheridos concesionarios de diversas rutas de transporte foráneo, excepto, el ADO.
Andrés Poot Alonzo también se refirió a la autopista federal concesionada Mérida-Cancún, de casi 320 kilómetros, el cual, dijo, es una de las más caras del país, pese a que tiene carencias en servicios para los usuarios.
Indicó que las autopistas concesionadas deben disponer de grúas, ambulancias, servicios de comunicación y otro tipo de apoyos, así como acotamientos en la carretera para que los vehículos de carga o particulares que presenten fallas puedan colocarse en esos espacios con seguridad con seguridad.
La autopista Mérida-Cancún carece de esos servicios y hay la posibilidad de que aplique próximamente un incremento en sus tarifas, lo cual, dijo, sería aún más lesivo o perjudicial para los transportistas tanto de pasajeros como de carga.
(Jesús Mejía)
(Foto: Archivo)
