Mérida, Yucatán.- Con 53 modelos a escala, entre ellos el avión que utilizó el presidente Francisco I. Madero, los primeros turborreactores y helicópteros de reciente adquisición, coleccionistas de “Bunker Maya” participaron en la conmemoración del 104 aniversario de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM),

A solicitud de la institución armada, el grupo encabezado por el doctor Jorge Alvarado Mejías exhibió los aparatos en miniatura y reprodujo la base aérea de Santa Lucía, Estado de México, con un Hércules, el de mayor capacidad de carga de la FAM.

De manera paralela presentaron carteles con datos sobre la historia de la aviación en el país, en particular la imagen del primer avión de pelea de la aviación militar de México mostrado en un desfile Frente a Palacio Nacional, en la Ciudad de México, el 16 de septiembre de 1918.

Los primeros aeroplanos que cruzaron los cielos, así como diversas fotografías sobre el Escuadrón 201 –que combatió con éxito en las Filipinas durante la II Guerra Mundial– formaron parte del acervo documental expuesto en el Hangar de la FAM en la Base Aérea Militar (BAM) de esta ciudad.

Resalta el avión que utilizó el presidente Madero el 30 de noviembre de 1911 cuando voló por 12 minutos como pasajero en un Deperdussin 1921 biplaza, en el que tuvo como piloto a George M. Dyitt, siendo el primer jefe de estado que voló a nivel mundial.

También se mostraron los biplanos Boeing Stearman PT-17 que aún se utilizan para exhibiciones aéreas en México y fotografías de Harriet Quimby, la primera mujer piloto que realizó demostraciones de vuelo en México

Destaca la última adquisición en 2014, de la Armada de México, el Eueocopter (helicóptero) llamado ec725 Super Caracol, con velocidad de desplazamiento de hasta 324 kilómetros por hora y puede volar hasta una altitud máxima de seis mil metros, capaz de transportar hasta 29 pasajeros.

También se observó a los primeros aviones con turborreactores y otros que fueron capaces de romper la barrera del sonido, así como algunos de los cazas que forman parte de los escuadrones aéreos de la FAM.

Las colecciones de aviones fueron prestadas por algunos de sus propietarios, entre ellos José Carlos Cárdenas y Antonio Abimerhi Palacios, éste último con la reproducción de la base aérea de Santa Lucía, Estado de México, con diversas aeronaves.

La colección suscitó el interés de oficiales de la BAM Número 8, en particular del comandante Jesús Ernesto Valenzuela Sánchez, con el fin de mostrar la génesis, desarrollo y fortalecimiento de la institución armada a 104 años de su fundación.

(Jesús Mejía)