Por Adela Mac Swiney González

Madrid, España.- Destacando la energía increíble que tiene México, la arquitecta catalana Carmen Pinós presenta en el Museo ICO de Madrid la exposición “Escenarios para la vida”, con más de 200 imágenes de sus creaciones urbanas, muchas de ellas en distintos lugares de México, como Guadalajara, Puerto Vallarta, en Jalisco o Punta Mita, en Nayarit.

La muestra, que podrá verse hasta el próximo 9 de mayo, es comisariada por el también arquitecto Luis Fernández-Galiano, quien define a Pinós como una artista “de la razón, pero también de la emoción y de la intuición”.

“Carmen Pinós construye escenarios para la vida y lo hace reuniendo la razón y la emoción: el trabajo de la arquitecta barcelonesa muestra que la sensibilidad extrema manifiesta en la materialización de sus proyectos se apoya en el soporte sólido de una inteligencia inquisitiva, empeñada en entender el mundo y estimulada por una extensa experiencia lectora”, sostuvo.

En entrevista para LectorMX, Pinós habló de su experiencia en México, país al que dijo, le debe mucho, además de destacar la energía increíble que tiene.

“Le debo mucho a México, sobre todo a mis clientes, mis clientes creen en mi”, sostuvo para agregar que tuvo la oportunidad de hacer la Torre Cube, en Guadalajara, un edificio con una altura de 70 metros, construido en una zona de muy alta intensidad sísmica.

“Es un edificio que ha tenido mucho reconocimiento internacional, me dieron el Premio Bienal de la Arquitectura en España y el año pasado estuvo en la Bienal de Venecia y poderlo construirlo se basó totalmente en la confianza que me tenían, porque que en el fondo, tampoco me conocían tanto”, hizo hincapié.

Por ello, la arquitecta catalana aseguró que México significa mucho para ella, “significa dónde me he encontrado más cómoda, tengo grandes amigos, me encanta ir a México, siento mucho que ahora, llevo tiempo sin ir, en Punta Mita estoy haciendo una casa para uno de mis clientes y voy con la dirección de obra a base de fotos, a base de videos y siento mucho no ir porque lo añoro”.

Añadió que en México hay una energía increíble y después, todo es más fácil, “se basa más en la confianza, aunque es difícil porque hay que entender el sí cuando es sí; el sí cuando es sí, pero en realidad es no, pero es como todo, cuando entras en una cultura, en otro ámbito tuyo, has de hacer un esfuerzo para entender, lo que no puedes es ir con lo tuyo y ponerlo allí”.

Carmen Pinós inició su carrera en la década de 1980 junto al arquitecto Enric Miralles, período al que se dedica la primera parte de la exposición y donde se recogen ocho proyectos realizados conjuntamente.

Es posible que esta primera etapa sea la más conocida mediáticamente y, sin embargo, no es la de más peso en la carrera de Pinós.

Su férrea creencia en la necesidad de acoger el entorno, sea natural o urbano, se aprecia en todos sus trabajos, entre los que destacan el Caixaforum de Zaragoza (2014), la barcelonesa Escuela Massana de Artes y Diseño (2017) o la propia Torre Cube, de Guadalajara, Jalisco (2005). En el 2006, el MOMA de Nueva York adquirió para su colección permanente la maqueta de esta última. El Museo ICO busca con esta exposición acercar la figura y obra de la arquitecta al gran público.

(LectorMx)