Mérida, Yucatán.- El pasado y el presente demuestran que pueden convivir en el Centro Histórico. Las historias del Oro Verde, de los personajes que intervinieron activamente en la formación del Yucatán nuevo y el devenir del día a día del siglo XX se vuelven uno solo con la vida contemporánea.

Siete casonas remodeladas en los barrios de La Ermita, Santiago, Santa Anna y San Sebastián son prueba de lo anterior, siendo dignos representantes de lo colonial y lo moderno. Y ayer abrieron sus puertas al público en general como parte del Octavo Tour de Casas del Centro Histórico, evento realizado a beneficio de la Fundación BAI.

Este evento llamó la atención de turistas extranjeros, nacionales y especialmente de jóvenes estudiantes de Diseño Gráfico, Arquitectura, Diseño de Interiores y Fotografía, mucho de los cuales hicieron el recorrido en sus bicicletas sin importar la lluvia y el tráfico característico del primer cuadro de la ciudad.

Cada una de las residencias fue redecorada al gusto de los nuevos propietarios extranjeros, con excepción de la ubicada en la calle 64 entre 59 y 57, que es propiedad del odontólogo Fernando Palomeque, conocido entre los integrantes de la Fundación BAI como “Doctor Sam”. Seguramente cientos de yucatecos han pasado frente a la puerta del lugar y jamás imaginaron qué secretos guardaba este diseño del arquitecto Carlos Manuel Montes de Oca.

La casa recuerda a una de esas películas de horror de los setenta, de amplios jardines, gran pórtico y donde el tiempo parece no haber transcurrido. Los muebles son de 1937, fotografías de familia y de temas taurinos decoran las paredes y varios puntos de la sala, estudio y comedor y el gran salón está iluminado como si cada fin de semana recibiera grandes cenas-baile.

En la calle 76 de Santiago se encuentra el hogar de Ed Zielinski y Chris Payne, quienes también se encargaron del diseño de remodelación. El estilo vanguardista y contemporáneo respeta la estructura de la casa, donde el centro son las áreas verdes y la piscina y cada una de las habitaciones está en contacto con la naturaleza.

En ese mismo barrio pero en la calle 72 está “Casa Colibrí”, dirigida por Remixto. Esta casona se renta para quienes desean disfrutar sus vacaciones por Yucatán, consta de dos habitaciones y tres niveles. El grupo la adquirió hace año y medio y el diseño es obra de Roger González Escalante.

A una esquina del Parque de Santiago está La Casa de la Puesta del Sol, que perteneció a la familia de Vicente Solís. Fue objeto de numerosas modificaciones, como la transformación de una de las habitaciones en una cochera. Antes de que fuera restaurada originalmente por Tony Cecile en 2008, era una oficina. Hoy es hogar de Claudia Joslyn quien vive en la parte de arriba dejando el piso inferior como una casa de huéspedes.

La cocina de La Casa de la Puesta del Sol es de talavera, así como el decorado de los cuartos; los siete ventiladores fueron reemplazados por 15 candelabros.

En los rumbos de San Sebastián está la Casa Sur, de Sara y Ty Bateman, siendo la primera la encarga de la remodelación con gran jardín posterior, piscina y detalles muy personales en la decoración. Unas calles más adelante, en La Ermita, Russ y Leanna Staines llamaron a Henry Ponce para transformar su nuevo “oasis en el Centro Histórico” con toques bohemios y llenos de arte.

El recorrido se completa con la casa de Holly Theriault, construida por Alejandro Vales y Martha Espejo.

(María del Mar Boeta)