Mérida, Yucatán.- Pese a ser una de las imágenes más representativas de las culturas prehispánicas, sobre todo entre los toltecas y los mayas, el Chac Mool y sus réplicas se encuentran en proceso de deterioro, por lo que urge su rescate, restauración y conservación.
El arqueólogo Rubén Maldonado Cárdenas presentó a sus colegas y autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) una lista de las condiciones en que se encuentran 17 esculturas de Chac Mool halladas en la vasta zona arqueológica de Chichén Itzá.
Precisó que la primera de esas esculturas fue localizada en los trabajos de exploración de Augusto Le Plongeon en 1875 y a la fecha han sido localizadas otras 16 de ellas en Chichén Itzá. Esta ciudad y Tula es donde se encuentra el mayor número de réplicas del mundo precolombino.
Al participar en el pasado Simposio de Cultura Maya “Ichkaantijoo”, organizado por el Centro INAH de Yucatán, planteó que estas esculturas también se encuentran en Cholula, Puebla; Ciudad de México, Tula, Hidalgo; Acolman, Estado de México; Tzintzuntzan, Michoacán; Tulum, Quintana Roo; Quirigua, Guatemala; Ahuachapan, El Salvador.
El especialista destacó los trabajos de localización de estas esculturas en Chichén Itzá por Peter Schmidt, Teoberto Maler y Edward Thompson, entre otros. De acuerdo con los estudios, estas figuras se remontan al período clásico tardío entre 800 y 1050 después de Cristo que marcan el apogeo de Chichén Itzá.
Indicó que al Chac Mool, cuyo nombre en maya significa “El de la gran garra”, se le atribuye por lo general ser mensajero de los dioses, sin embargo, existen indicios que estaban vinculados a los sacrificios humanos y a ceremonias a Chac, el dios de la lluvia.
El Chac Mool , añadió, ha sido interpretado de diferentes maneras, ya sea como personajes que recibían los corazones aún palpitantes de los sacrificados, pero también eran señalados como dioses del pulque en el centro de México y guerreros cautivos.
La realidad de lo que estas esculturas representaron permanece en la oscuridad, dijo el arqueólogo, quien expuso la necesidad de profundizar estudios desde el punto de vista del arte como escultura, pero también desde la perspectiva de la arqueología para conocer su significado. (Jesús Mejía)
(Foto tomada de Internet)