Mérida, Yucatán.- El presidente del  Centro Empresarial de Mérida (Coparmex), Gustavo Cisneros Buenfil, criticó hoy la ausencia de programación y de “sensibilización” en el alza de los combustibles.

Al ahondar en el rechazo provisional de la agrupación nacional a la implementación del Acuerdo para el Fortalecimiento Económico y la Protección de la Economía Familiar, explicó que las medidas que éste contempla son muy vagas.

“También reconocemos que muchas de las decisiones que se están tomando a nivel federal caen meramente en la parte de simulación, se pretende hacer algo, se hace un gran anuncio, pero en los hechos no dan los resultados”, ponderó.

Y a modo de ejemplo, citó que la Ley de Ingresos del Gobierno Federal, aprobada el 10 de noviembre, ya consideraba los incrementos de precios de las gasolinas, y en ese entonces se debió convocar a todos los actores políticos y económicos para que se involucraran en un programa como el que se presentó ayer (lunes).

“Porque sabían en ese momento el impacto que iba a generar en la población el incremento en las gasolinas, y eso no se hizo”, cuestionó.

Por el contrario, abundó, el 27 de diciembre el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, anunció nuevos precios cuando la mayor parte de la gente estaba de vacaciones.

“Eso nos demuestra que no hubo una programación, no hubo un ejercicio de sensibilización, no hubo un acuerdo para poder paliar los efectos que iba a tener esta medida.

“Más bien vemos a un Gobierno que es reactivo al desencanto social que se traduce en las marchas, en las movilizaciones y en algunos casos el saqueo.  Eso es exactamente lo que queremos evitar, no queremos anuncios que suenen a grandes logros cuando en el fondo lo que necesitamos son cambios estructurales en la situación económica de nuestro país sobre todo”, dijo.

En conferencia de prensa, admitió que hay “decepción generalizada” hacia la administración de Enrique Peña Nieto.

“Entonces, definitivamente en el país hay muestras de desencanto y eso no lo decimos los empresarios, lo dice toda la población”, puntualizó.

Refirió que los indicadores así lo demuestran, entre ellos que se haya elevado en más de 10 puntos porcentuales la deuda con respecto al Producto Interno Bruto (PIB) y la carencia del crecimiento esperado.

El líder patronal planteó encontrar soluciones dentro del marco de la ley, con la participación de los ciudadanos, ya que la imposición de medidas generalmente tendrá rechazo de la sociedad.

“Este país necesita un cambio estructural, un cambio de fondo y necesitamos que se dé a través del diálogo y no sea a través de anuncios espectaculares”, insistió.

Otras de las razones por las que Coparmex no suscribió el documento, precisó, es que no se ve en Gobierno Federal “esfuerzos concretos y cuantificables”.

Nosotros necesitábamos, prosiguió, no solamente un calendario, una serie de buenas intenciones y deseos, sino lo que se buscaba de fondo es que hubiera objetivos concretos en donde el Gobierno se comprometiera a hacer reducciones en su gasto y que creo que a todas luces es muy alto.

En tal sentido, reveló que se iniciarán foros regionales para recabar las inquietudes y demandas de la población, cuyas fechas en Yucatán serán definidas tentativamente la próxima semana.

“Tenemos que trabajar en un acuerdo global que nos permita que el Gobierno Federal cambie completamente de forma su gasto y que sea muy revisado, y que sea enfocado a la inversión.

“En este año tenemos la inversión más baja desde 1930 en infraestructura, en obra pública, y eso lo vamos a pagar todos a la larga”, advirtió.

Cisneros Buenfil también llamó al empresariado yucateco a que actúe de manera responsable, y entienda que no es el momento para aprovecharse de la situación de crisis que vive el país.

Luego descartó que se pretenda o se pueda regular precios o establecer una cacería de brujas, ya que, sostuvo, ninguna autoridad puede establecer el costo real de los productos y servicios.

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