Por Víctor Hugo Lizama Morales

Cada vez que tenemos la suerte de viajar por el interior de nuestra península yucateca y nuestros visitantes ven mangos, deriva una pausa obligatoria. Impresiona ver con que gusto disfrutan de esta fruta que parecen infantes probando chocolate por primera vez en su vida. Y pese a que conocen la fruta, nunca les ha sabido mejor en sus lugares de origen. Un ejemplo de esto fue un grupo de islandeses a los cuales debíamos de darles el desayuno por 8 días (cosa fácil pues se trataba de darles fruta) y observábamos con que ganas se la comían, en especial el mango. También nos ocupamos de un grupo de 70 franceses por largos 23 días y todos comían a diario mango. Para nosotros no es una novedad, pero quizá no sabemos que las hojas de esta delicia son de uso medicinal y propiamente se usan para combatir a un enemigo muy conocido en Yucatán, la diabetes. Ya hace unas semanas nos lo recomendó Luis López y también hizo mención de las hojas de higo (este tema lo trataremos luego). Hace 2 días de nuevo me lo comentó mi hermana Nancy y por esto nos enfocamos un poco a este remedio. La mejor forma de controlar la diabetes es tener también controlado la azúcar en la sangre.

Pocos sabemos que las hojas de mango son un recurso para producir insulina y además ayuda a la distribución de la glucosa, la cual puede disminuir los niveles de azúcar en la sangre. Las hojas de mango pueden reducir los síntomas de la diabetes, cosas como la constante orina por las noches, la pérdida de peso inexplicable y la visión borrosa.

La presencia de fibra y vitamina C en las hojas de mango ayudan al organismo a eliminar colesterol que es un causante de la diabetes. Estas hojas tienen vitamina A, la cual mejora la salud de los ojos.

Es muy sencillo obtener todos estos beneficios, solo necesitas unas 10 o 15 hojas de mango frescas. Ponga a hervir un litro de agua y ya hirviendo agregue las hojas, apague el fuego y déjalo reposar toda la noche.

Por la mañana en ayunas, tome una taza de té de estas hojas de mango. Los resultados no serán inmediatos, pero al cabo de 2 meses hay una mejoría importante. El masticar las hojas también fortalece los dientes y actúa contra ampollas bucales.

Mi correo es: victorhugo.moringa@gmail.com